El conseller de Educación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, pide la implicación de los ayuntamientos y la sociedad para reactivar la cultura, un sector que, según dice, nos ha ayudado a pasar "las horas muertas en casa" durante el confinamiento, y está demostrado que "es seguro".

En los Desayunos de la Agencia EFE en el Colegio de Abogados de Valencia, Marzà defiende también la importancia de la práctica del deporte, y confía en que pueda haber una regulación conjunta para las distintas autonomías sobre las medidas de seguridad a adoptar en los deportes no profesionales.

Al lado del sector cultural

Marzà afirma que la Conselleria estará siempre al lado del sector cultural la Conselleria estará siempre al lado del sector culturalpara que puedan desarrollar "la máxima actividad posible", y así lo está haciendo, programado y reprogamado actividades, incluso algunas que tenían previsto organizar empresas privadas durante los meses de pandemia.

"Ahora somos nosotros los que estamos alquilando las salas, pagando los cachés de los artistas y empresas para que se puedan realizar estas actividad desde la máxima seguridad posible", afirma el conseller, quien insiste en que "la cultura es segura si se organiza bien".

Destaca la inversión extraordinaria de 4 millones realizada por la Conselleria para reactivar el sector, y hace un "llamamiento claro y contundente" a los municipios para que apuesten también por la cultura. "Hemos mandado una carta a alcaldes y alcaldesas para decirles que es un momento para seguir apostando por la cultura", señala.

Implicación de administraciones y sociedad

También pide la implicación de la sociedad, a la que anima a consumir más cultura, y le recuerda que este tipo de ocio "es muy necesario también" ya que aporta paz y tranquilidad, y contribuye a la reflexión y la crítica, algo necesario en un momento como este.

"Hay que estar ahí", defiende el conseller, quien asegura que el sector se merece que se apueste por la cultura "porque ha trabajado muchísimo, hay grandísimos profesionales y está pasando por una situación muy complicada".

"También desde el punto de vista del agradecimiento", añade, y es que Marzà se pregunta cómo habríamos podido pasar "las horas muertas en casa si no tuviéramos el cine, la música o los libros" durante el confinamiento.

"Si no hubiera personas que se dedicaran a eso, el confinamiento hubiera sido mucho más duro de lo que ha sido", manifiesta, y asegura que las actividades culturales tienen "todavía más control" que otras, aunque será necesario acostumbrarse "a las nuevas condiciones" de seguridad.

El conseller destaca el esfuerzo hecho desde su llegada al Gobierno en 2015 para reforzar las ayudas al sector, que se han "multiplicado por dos, por tres y por cuatro" en estos cinco años, aunque reconoce que no es suficiente y por ello hace "un llamamiento al conjunto de administraciones y a la sociedad".

"No se puede hacer solo desde una administración, hay que ir más allá", asegura, y en ese sentido reclama al Ministerio que habilite un plan espacial para la Cultura que se sume a lo que están haciendo las autonomías.

Deporte

En materia deportiva, el conseller explica que toda limitación a la actividad en estos momentos depende de la Conselleria de Sanidadpor tratarse de restricciones por cuestiones de salud para evitar contagios, y no de una cuestión de modelo organizativo ni de regulación deportiva.

Afirma que el deporte "es salud" y "es bueno, no solo físicamente, también mentalmente", por lo que es importante "promover la actividad física", especialmente entre los escolares, aunque no con las mismas condiciones que teníamos antes.

En este sentido, cree necesario que exista un marco común en el conjunto del estado que regule y marque "un espacio de encuentro" en la práctica deportiva federada no profesional, al tiempo que tenga en cuenta "la diversidad de territorios y de opiniones que hay".

"Hay que tomar medidas más restrictivas de forma selectiva y por zonas en función de la situación epidemiológica, pero las genéricas, las que compartimos en una situación epidemiológica igual, deberían tener un espacio compartido", señala.

Si ese acuerdo no es posible, dice, la Conselleria de Sanidad regulará esta cuestión en la Comunitat Valenciana, donde le consta que ya hay "un trabajo alrededor de esta cuestión" y en breve, asegura, "habrá algún tipo de pronunciamiento por parte de Sanidad", porque "es evidente que hay que determinar cómo debe hacerse".

Según Marzà, hasta ahora esta práctica está regulada en una resolución de Sanidad del mes de julio, pero reconoce que con el inicio del curso escolar y con muchos más niños en contacto, hay que revisar esa regulación.