La operadora ferroviaria francesa SNCF, que iniciará su servicio de alta velocidad en España con su marca de bajo coste Ouigo en la línea Madrid-Barcelona el 15 de marzo de 2021, prevé empezar a operar la de Madrid-C. Valenciana como pronto a finales de ese año y la de Madrid-Sevilla en 2022. La directora general de Ouigo en España, Hélène Valenzuela, ve difícil que se pongan en funcionamiento los servicios en estas dos líneas antes de finales de 2021, aunque, a lo mejor, sí en la de Madrid-Valencia/Alicante, en función de cómo vayan las pruebas para homologar el tren con el que operará en España (Euroduplex de doble piso de Alstom).

Valenzuela señala que la compañía trabaja con Adif y la agencia estatal de seguridad, haciendo pruebas en la línea Madrid-Barcelona que «van muy bien», dado que ya circula con este tipo de tren desde la frontera francesa (París-Barcelona), y en la de Levante (sic), donde no descarta que pueda surgir algún problema.

SNCF contará con 14 trenes en España que ha sacado de su flota de 300 en Francia, para poder ser el primer operador en entrar a competir con Renfe, tras el proceso de liberalización del sector.

Valenzuela remarca que el desembarco en España es una apuesta de futuro de SNCF, por lo que se muestra segura de que pedirán la renovación del contrato de 10 años y no descarta ampliar la oferta. Preguntada por su rivalidad con Renfe, Valenzuela señala que «mi enemigo no es Renfe, es el coche o el avión». Y destaca que sus precios se situarán, de media, por debajo de la mitad de los actuales de Renfe «que son muy altos, por eso la alta velocidad ha sido infrautilizada. Si mantienes unos precios tan altos ahora, con la crisis económica por la covid-19, matas al tren», advierte.

Ouigo incluso intentará presentar una oferta «más atractiva» frente al ‘low cost’ del operador español, Avlo, que ya prevé tarifas que parten de los 10 euros. «Siempre tendremos la mejor oferta en el mercado, un precio nunca visto en España. Se podrá ir a Valencia en alta velocidad por lo mismo que cuesta el menú de un bar de la esquina. No nos queremos posicionar como un producto ‘premium’, sino asequible, aunque con calidad», añade.

Una calidad basada en varios elementos: una reserva de billetes de tren «en menos de tres minutos» vía app y web, algo que hoy «no es tan fácil», la digitalización de los servicios o que «no amontonarán» a la gente para que un tren no parezca el «gallinero» de un avión low cost.

En octubre, llegarán los primeros maquinistas de un total de 40 (todos españoles) para terminar su formación y que la compañía seleccionó hace un año a través de Captrain España (de mercancías), propiedad de SNCF.