Un lustro después y con dos sentencias por el medio, incluida una del Tribunal Supremo, el personal interino de la Generalitat vio ayer satisfecho su derecho a percibir los retrasos correspondientes a la carrera profesional. La nómina de septiembre llegó con sorpresa. Junto al sueldo correspondiente a mes vencido, los interinos e interinas afectadas han percibido una media de 70 ingresos por atrasos en concepto de carrera profesional que la Generalitat les adeudaba desde 2015, fecha en que empezó a pagar al funcionariado un plus retributivo vinculado a la antigüedad y a la evaluación del desempeño.

La cantidad que la mayoría puede ya ver reflejada en su nómina (según la entidad bancaria donde tengan la tengan domiciliada la notificación puede retrasarse unos días) varía según el grupo al que pertenece cada persona y el tiempo que trabaja de forma interina para la Administración, es decir, personal de conselleries sin tener en cuenta profesorado y personal sanitario que cobran otro tipo de carrera profesional.

Los de los grupos más altos (A1) y con 20 años de trabajo acumulan una deuda que podría ascender a 40.000 euros, un «sobre sueldo» nada desdeñable pero que llega después de años de reclamación. Así, por ejemplo, una interina del grupo C, con diez años de trabajo, habrá tenido una inyección de 6.000 y 7.000 euros.

La pelea por cobrar la carrera profesional se remonta al inicio en que el Consell de Alberto Fabra aprobó el decreto por el que se reconocía este plus retributivo para el personal funcionario de carrera, una reivindicación histórica de los sindicatos que pedían el mismo trato y reconocimiento para este personal que los ligados a la sanidad y la educación.

Sin embargo, la norma excluyó a los interinos y comenzó una batalla judicial que arrancó con un recurso de UGT ante el Tribunal Superior de Justicia. Pese a ganar la sentencia, el Consell alargó el proceso y recurrió ante el Supremo, que acabó dando la razón al sindicato al reconocer el derecho de los interinos con mas de cinco años de antigüedad a percibir el complemento correspondiente a la carrera profesional.

La conselleria que dirige Gabriela Bravo modificó el decreto y este verano anunció que en julio la nómina del personal interino comenzaría a ver reflejada la carrera profesional. Así fue, pero fue ayer, en la nómina de septiembre, cuando los atrasos se han pagado. Según los cálculos realizados entonces por la Conselleria de Justicia y Administraciones Públicas son 66 millones de euros que se repartirán 6.281 personas, unos 10.500 euros de media.