La Conselleria de Sanidad ha derivado a laboratorios privados hasta 70.000 pruebas PCR ante el colapso de las instalaciones públicas por el aumento de casos de coronavirus en esta segunda ola de la pandemia. Sanidad ha formalizado ahora los contratos con ocho laboratorios privados de València y Alicante acreditados para hacer estas pruebas aunque los encargos se hicieron de forma verbal el pasado 14 de septiembre, cuando los contagios de SARS-CoV-2 en la Comunitat Valenciana estaban en pleno auge.

Así, las empresas Centro Tecnológico Seguridad Alimentaria, Sequencing Multiplex SL, Progenie Molecular SLU, Imegen SLU, Sistemas Genómicos SL, Integrated Genetic Lab Services SL, Bionos Biotech SL y Epidisease SL están recogiendo los viales con las torundas que se pasan por la garganta de los pacientes en los laboratorios públicos de varios departamentos de salud según necesidades y dando los resultados en 24 horas a razón de 48,4 euros por cada PCR.

Por ahora, la conselleria ha formalizado ocho contratos que suponen la derivación de 70.000 PCR por un coste de 3,38 millones de euros aunque la estimación que se hizo en su día es tener que derivar al sistema privado otras 30.000 más. De hecho, Sanidad preparó un presupuesto de 4,8 millones para esta ampliación de recursos a principios de septiembre cuando se hizo palpable que los laboratorios de hospitales y centros de investigación públicos acreditados estaban al límite pese al esfuerzo realizado en estos meses para reforzarlos y se empezaban a retrasar los diagnósticos, algo incompatible con conseguir un buen control de la pandemia.

De cumplirse el total del contrato, Sanidad derivará a laboratorios privados 100.000 PCR. Casi las mismas pruebas que se hacen en dos semanas. Según las últimas cifras aportadas por el Ministerio de Sanidad, en la Comunitat se hicieron del 18 al 24 de septiembre 54.890 pruebas PCR con una media diaria de 7.841 cuando a mediados de agosto, del 14 al 20 de agosto, el ritmo semanal era de 45.220 algo más de 6.400 al día.

Desde Sanidad no han cerrado la puerta durante la pandemia a apoyarse en el sector privado —ahí están las 900 urgencias que se llevaron a la privada en lo peor de la crisis sanitaria— pero en este caso sí se ha preferido aguantar con medios propios y fomentarlos todo lo posible. El aumento de nuevos casos, la necesidad de tener diagnósticos rápidos para contener la expansión del virus y varios problemas con máquinas en algunas áreas y de falta de reactivos, aconsejaron finalmente adoptar la medida a principios de septiembre.

Gracias a la acreditación de laboratorios públicos y de esta ayuda externa, la Comunitat Valenciana ha logrado ir aumentando su capacidad diagnóstica del coronavirus vía PCR y ahora realiza 11 pruebas por cada 1.000 habitantes a la semana cuando a mediados de agosto la tasa era de 9 PCR por 1.000 habitantes. Aún así, la Comunitat sigue por detrás en el volumen total de pruebas realizadas con una tasa de 162 pruebas por 1.000 habitantes. La media de España, por ejemplo, está en 198 PCR por 1.000 habitantes y hay regiones como Asturias que tienen una tasa de 288, una de las razones, según dicen los expertos, de que esta región haya podido capear mejor que otras el efecto de esta segunda ola.

Pese al aumento de capacidad diagnóstica que se ha conseguido en estas semanas, aún hay quejas de pacientes que esperan casi una semana para saber si han dado o no positivo mientras están confinados en casa. Aquí el retraso en que el resultado de la prueba llegue a su destinatario final podría estar empeorando por otro problema: el colapso que viven en los centros de salud. Los médicos de Familia, que piden medidas urgentes para descargar sus agendas y trabajar en condiciones, critican que muchas veces la notificación de los resultados se atrasa, simplemente porque no dan abasto a hacer las llamadas a todos los pacientes que tienen en seguimiento por coronavirus.

A la espera de los test rápidos de antígenos

La actual saturación de laboratorios públicos y privados con pruebas PCR puede que sea, de aquí a poco, cosa del pasado. La Conselleria de Sanidad ya ha comprado las primeras 500.000 unidades del test rápido de antígenos Panbio, que da resultados de si hay infección por coronavirus en apenas 15 minutos y sin pasar por un laboratorio. Además, este tipo de test es diez veces más barato que una PCR.

El contrato con el laboratorio Abbot por 2,2 millones de euros ya está cerrado desde el pasado viernes, por lo que ahora solo toca esperar que los test lleguen y empiecen a utilizarse de forma efectiva. El Ministerio de Sanidad ya ha dado su autorización para que estas pruebas rápidas puedan ser utilizadas casi sustituyendo a las pruebas PCR, ya que sus niveles de especificidad y de sensibilidad (las probabilidades de detectar correctamente a pacientes sanos y enfermos) son casi parejas.

Eso sí, el ministerio, y tras las pruebas que se han hecho en el Instituto Carlos III, recomienda que los test se usen en personas que tengan síntomas y que estos hayan empezado hace menos de cinco días. De no ser así, la fiabilidad de estos test rápidos baja y sus resultados no son equiparables a los de una PCR: Los test funcionan detectando no al virus en sí sino a una de las proteínas que lo recubren y necesitan también de una muestra de exudado de la garganta que se recoge, como ahora para una PCR, con una torunda de algodón.