La empresa pública que gestiona el circuito Ricardo Tormo de Cheste cerró 2019 con unas «pérdidas significativas» de 5,18 millones de euros que han afectado negativamente a su situación financiera y patrimonial.

Así lo hace constar la Sindicatura de Comptes en un informe de fiscalización que advierte de que la sociedad Circuito del Motor se encuentra en «causa de disolución», al acumular un fondo de maniobra negativo de 6,2 millones de euros, después de que el desequilibrio financiero se haya incrementado un 63% respecto al anterior estudio del organismo. El patrimonio neto de la sociedad, por otra parte, ha retrocedido en 5,47 millones de euros.

La situación, mitigada por el apoyo financiero brindado por la Generalitat, obliga a la firma pública a restablecer el equilibrio mediante una operación societaria.

El órgano fiscalizador pone el foco en que el patrimonio neto del Circuito del Motor es inferior a la mitad de su capital social en este 2020. El circuito obtuvo en 2019 ingresos suficientes para cubrir el 74,7% de sus gastos e inversiones (un 10% más que en 2017). Entre las recomendaciones contenidas en el informe, la Sindicatura pide a la sociedad que reorganice su departamento de contratación para introducir mecanismos de control interno que permitan garantizar «que en la tramitación de los expedientes de contratación futuros no se produzcan incumplimientos de la normativa vigente», como los que se han detectado en 2019. Además, el organismo vuelve a insistir en que los terrenos sobre los que se ha construido el circuito de velocidad son propiedad de la Generalitat «sin que se haya formalizado ninguna cesión» a día de hoy.

Por otra parte, la situación de excepcionalidad motivada por la covid ha desembocado en una importante disminución de ingresos y gastos de la firma pública, que espera cerrar 2020 con unas pérdidas de 4,3 millones de euros.