Cinco municipios de la Comunitat Valenciana acogen a cinco familias sirias procedentes de los campos de refugiados del Líbano a través del programa Agermanament Comunitari Valencià, una iniciativa patrocinada por Acnur junto con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en la que colaboran otras administraciones y entidades.

La propuesta busca contribuir «a empatizar y a sensibilizar» con los refugiados que llegan esta autonomía para iniciar una nueva vida y lograr una «mejora cualitativa y cuantitativa de proceso de acogida y de inclusión». Así lo aseguró ayer la vicepresidenta del Consell y titular de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, tras la reunión celebrada en València para analizar este proyecto y su posterior presentación. En estos actos participaron también la secretaria de Estado de Migraciones, Hana Jalloul; la representante de Acnur en España, Sophie Muller, y el alcalde de València, Joan Ribó, en nombre de una de las cinco localidades en las que se desarrolla esta experiencia.

En cinco municipios

Además de la capital valenciana, estas poblaciones son Alaquàs, Almassora, Calp y Cocentaina. En total son 23 las personas de distintas edades -hay niños que han sido ya escolarizados- que agrupan las cinco familias que residirán en la Comunitat Valencia a través de Agermanament Comunitari Valencià. El programa se lleva a cabo por medio del Servicio Jesuitas a Migrantes España y Cáritas Diocesana Segorbe-Castelló, Orihuela-Alicante y València. Oltra recordó que este proyecto tiene como fin «contribuir a la mejora de las responsabilidades compartidas, alentar la expansión del reasentamiento de las personas refugiadas y brindar un vehículo que movilice a la ciudadanía en el apoyo a los refugiados.