Las personas atendidas en la Asociación Proyecto Hombre en la Comunitat Valenciana durante los últimos siete años han sido mayoritariamente hombres, el 87,4 por ciento, más de la mitad con edades comprendidas entre los 30 y 49 años, y la principal sustancia consumida ha sido la cocaína (33,2 por ciento), seguida del alcohol "en grandes cantidades" (9,4 %).

Estas son algunas de las conclusiones del informe Extraordinario del Observatorio 2013-2019 presentado este jueves por la Asociación Proyecto Hombre, un informe que recoge datos evolutivos del perfil de las personas con problemas de adicción atendidas en sus Centros a lo largo de siete años, así como las tendencias en el ámbito de las adicciones y sus características psicosociales, epidemiológicas y sociodemográficas.

En los centros de la Comunitat Valenciana, solo el 16,6 por ciento de las personas atendidas en este periodo era mujer; con respecto a la edad el 37 % tenía entre 30 y 39 años, el 33,5 % entre 40 y 49 años y el 13,5 % entre 20 y 29 años, y la gran mayoría (58,2 %) tiene empleo a tiempo completo; el 17,4 % es desempleado y el 10,5 % trabaja a tiempo parcial con un horario regular.

  

Con respecto a las adicciones, el 32,2 % es consumidor de cocaína; el 9,4 % de "grandes cantidades de alcohol", el 9 % afirma ser consumidor de "cualquier dosis" de alcohol; el 23,1 % asegura ser consumidor de alcohol y otras drogas; el 14,7 por ciento toma más de una sustancia; el 5 % es adicto al cannabis; y el 2,5 % a la heroína.

En España, la evolución en los indicadores económicos y sanitarios marca tendencias en el Perfil de la Vulnerabilidad. Tanto los datos globales como las tendencias de evolución desde 2013 en este Observatorio remarcan el perfil de vulnerabilidad social de las personas con problemas de adicción en tratamiento en los Centros de Proyecto Hombre.

En esa línea de vulnerabilidad social, y en el contexto de la pandemia, se ha presentado también hoy la campaña de sensibilización “V de Valientes”, que refuerza la idea de que las personas con problemas de adicción, especialmente vulnerables, están haciendo frente a todos los retos que está planteando la crisis sanitaria.

La campaña “V de Valientes” es la “otra cara” de esta Vulnerabilidad de las personas con problemas de adicción en tratamiento, ya que pone en valor y muestra a todas las personas que forman Proyecto Hombre -personas con problemas de adicción, familiares, terapeutas, voluntarios y voluntarias- como personas preparadas, motivadas y con Valentía para afrontar cualquier problemática.

El modelo


Proyecto Hombre aborda las adicciones a través de un método biopsicosocial que persigue la maduración y el crecimiento de la persona. Cuenta desde su origen con un método propio que se ha mantenido invariable a lo largo de su historia.


Este método consiste en identificar el problema existencial que induce a la persona a la adicción y trabajarlo desde un marco terapéutico-educativo para lograr que recupere su autonomía, su sentido de la responsabilidad y su capacidad para tomar decisiones, y volver a ser un miembro activo de la sociedad.

Si algo define la esencia de Proyecto Hombre es que cree en la persona, en su capacidad de cambiar y superar las adicciones que le han impedido desarrollarse plenamente. Considera que la adicción es el síntoma de un problema que reside en la persona. Este planteamiento, inspirado en la filosofía humanista, coloca a la persona y no a la adicción en el centro de todo el proceso.


Para Proyecto Hombre es muy importante la involucración y el apoyo de la familia en todo el proceso terapéutico-educativo, por eso trabajan con ella y en algunos casos con el entorno social más cercano (amigos, compañeros de trabajo etc…).