A récord diario y sin previsión de parar. Es la tendencia que está marcando desde el cercano inicio de mes la peor de las curvas de evolución de esta pandemia de coronavirus, la de fallecidos. Si el lunes día 2 se notificaban 18 fallecidos —el máximo de la desescalada estaba, por ahora en las 19 muertes del pasado día 27 de octubre— el martes llegó con un récord de 20 víctimas en 24 horas que quedó eclipsado ayer por otro máximo: 21 fallecidos por la covid-19 en solo un día. Para encontrar registros más altos hay que echar la vista atrás hasta el 23 de abril, cuando la primera ola apenas llevaba cinco semanas de recorrido y, aún así, las cifras diarias de muertes ya habían empezado a relajarse tras los máximos de 68 víctimas en un día del 1 de abril.
Por ahora se desconoce hasta dónde crecerá esta curva en la segunda ola de la pandemia pero lo cierto es que noviembre ha empezado marcando una tendencia negra: solo en los cuatro días que van de mes se han contabilizado ya 59 víctimas, una tercera parte de todas las que hubo el pasado mes de octubre. Según el detalle ofrecido ayer por la Conselleria de Sanidad, la mayoría de muertes se han registrado en Alicante.
Once de las 21 víctimas eran de esta provincia, ocho de la provincia de València y dos de la de Castelló y, cuatro de ellas, vivían en alguna residencia de mayores, apuntalando la tendencia de esta segunda ola de que las muertes por covid-19 se están dando, mayoritariamente, fuera de centros sociosanitarios.
El ministerio añade 37 muertos
Con estas 21 víctimas, la lista de fallecidos sube hasta los 1.883 muertos oficiales. Ayer, el Ministerio de Sanidad modificó los datos totales de casos y fallecidos de las comunidades tras depurar datos y elevó el cuenteo de víctimas de la covid-19 en la C. Valenciana en 37 personas más hasta los 1.857 fallecidos, con lo que la administración valenciana aún estaría reconociendo 26 víctimas de más con respecto a las cuentas de Madrid. La diferencia podría deberse a que, desde la primera ola, la Conselleria de Sanidad decidió contabilizar como fallecidos por covid-19 a los mayores en residencias que, pese a no tener resultado resuelto, sí habían enfermado al mismo tiempo que otros residentes que sí eran positivos. Pese a este reconocimiento de muertes sin PCR de por medio, médicos de atención primaria alertaron hace meses que en marzo y abril fallecieron muchas personas en sus domicilios, sobre todo ancianos ‘frágiles’ con sintomatología y clínica compatible con la covid-19 pero a los que no se les llegó a hacer una PCR y, por tanto, no llegaron a sumar a la estadística oficial. Esta está pendiente de depurarse gracias a los datos de defunciones de registros oficiales.
El nuevo máximo de muertes se registró en un día con 1.804 positivos, menos que los de un día anterior, pero por encima de la media de 1.500 o 1.600 casos que marcó los registros de la semana anterior. Pese a que se dieron también ayer 1.264 altas, el número de casos activos, esto es, el número de personas que están enfermas en estos momentos sigue creciendo. Son ya 13.187, el 17,01 % del total de positivos.
Doble de ingresos en 17 días
Y con más casos a diario, la curva de hospitalizados (que es la que empuja después a la de muertes) sigue también creciendo. Según las cifras oficiales de la Conselleria de Sanidad, ayer había ingresadas en hospitales valencianos 1.321 personas por la covid-19, 209 de ellas en alguna UCI.
Junto a la de nuevos casos, la de hospitalizaciones es la curva que de forma más acusada está reflejando la entrada de la C. Valenciana en esta segunda ola. Desde el 19 de octubre, día en que empezó a recrudecerse la pandemia, la cifra de personas ingresadas se ha duplicado pasando de los 665 pacientes en hospitales a los 1.321 que había ayer, 749 en hospitales valencianos, 456 en los de Alicante y 116 en los de Castelló. La cifra de pacientes graves en UCI sigue creciendo y también se ha doblado en este lapso de tiempo, de 106 pacientes UCI el 19 de octubre a los 209 registrados ayer. Pese a que la Comunitat Valenciana tiene aún capacidad en sus unidades de críticos, la presión hospitalaria ha obligado a algunos centros a derivar a otros hospitales a pacientes críticos.
