En medio del debate sobre la necesidad de adoptar medidas más duras para combatir la segunda ola de la pandemia , el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volvió ayer a apelar a la «moral de victoria» y a la «disciplina colectiva» que permitieron doblegar la primera ola para lanzar un mensaje de optimismo.

El jefe del Ejecutivo situó a principios de mayo de 2021 la implementación de las campañas con las nuevas vacunas «que podrían estar listas para ese momento», coincidiendo con el final del estado de alarma de seis meses aprobado por el Congreso. Esta circunstancia, acompañada del cambio de estación, «nos ayudarán a recuperar progresivamente la ansiada normalidad», ahondó Sánchez durante la presentación del plan de recuperación y transformación de la economía en la Ciutat de les Arts de València.

El anuncio se produce dos semanas después de que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, avanzara que el Gobierno espera recibir las primeras 3,1 millones de dosis de la vacuna entre finales de este año y principios del que viene si las investigaciones avanzan y nada altera la hoja de ruta marcada.

Hasta entonces, Sánchez llamó a la ciudadanía a actuar «con el mismo esfuerzo y resistencia» que en primavera, con el objetivo de volver a doblegar la curva. El presidente del Gobierno pidió un plazo de «dos o tres semanas» para evaluar las medidas que se están tomando por el momento antes de aplicar restricciones más severas como piden algunas comunidades autónomas. Una «revisión» que también ha puesto encima de la mesa el ministro Illa. Frente a las críticas, en cualquier caso, el jefe del Ejecutivo Central puso en valor la estrategia nacional desplegada por el conjunto de las administraciones, acordada en el seno del Consejo Interterritorial de Salud, como instrumento que guía las decisiones, ante los interrogantes que se plantean sobre posibles nuevos confinamientos domiciliarios. Una hoja de ruta que descansa sobre tres pilares: los indicadores comunes y homologados para todas las autonomías; el repertorio de acciones acordadas en común y respaldadas por el Estado de Alarma (que van desde la limitación de horarios o de personas en espacios públicos a los cierres perimetrales o clausura de establecimientos); y una evaluación común para medir la eficacia de estas medidas.

Urge a aprobar los presupuestos

Sánchez condicionó la puesta en marcha este año del Plan de recuperación y transformación de la economía española -con el que aspira a movilizar 72.000 millones de euros de fondos europeos hasta 2023- a la necesidad de que el Congreso dé luz verde cuanto antes a los presupuestos generales del Estado. «El éxito dependerá de la rapidez con la que aprovechemos esta oportunidad histórica» que brinda la UE, advirtió el jefe del Ejecutivo, que pidió a los partidos que superen «la miopía de las líneas rojas» para agilizar las cuentas porque «su aprobación a tiempo es fundamental para el correcto desarrollo de los proyectos contemplados en el plan», que el Gobierno quiere tener aprobados antes de acabar 2020. «Si España acuerda, España gana», remachó Sánchez.

El citado programa se apoya en una inversión sin precedentes de fondos de la Unión Europea y pivota sobre cuatro ejes: la transición ecológica, la digitalización, la igualdad y la cohesión social y territorial. El Gobierno se marca los objetivos de impulsar el PIB en 2,5 puntos anuales, crear 800.000 empleos y acelerar un 40 % los objetivos de transición ecológica.

Las dosis compradas para la covid «superarán al número de españoles»

Mientras Pedro Sánchez apuntaba a mayo como el mes en que las campañas de vacunas covid podrían estar ya activas, la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón, señalaba que la cantidad que se pretenden comprar de dosis contra el virus «superará al número de españoles», subrayando en paralelo la importancia de ver estas vacunas como «una inversión absolutamente necesaria para recuperar la normalidad».

Calzón, que ayer compareció en la Comisión de Sanidad del Congreso para detallar las cuentas de su departamento para 2021, dio así por hecho que el número de vacunas que se adquirirán superará los 47 millones de personas que componen la población. No en vano, la afirmación de la responsable sanitaria llega pocos días después de que el Consejo de Ministros autorizara la compra de 31,5 millones de vacunas, de las que 3,1 millones llegarán el próximo diciembre si el fármaco de Astrazeneca supera los filtros de seguridad.

 En esta línea, en su intervención, Calzón también se refirió, al igual que hiciera el ministro Salvador Illa hace unas jornadas, a un horizonte de siete tipos de vacunas, de siete compañías distintas, ante lo que explicó que los plazos vendrán determinados «por el desarrollo clínico y las autorizaciones», siempre con las máximas condiciones de seguridad. Además, la secretaria de Estado recordó que de los fondos europeos se presupuestan 1.000 millones de euros para la adquisición de vacunas covid y 10,8 millones para fomentar la vacunación entre la población española y combatir la desinformación.