Un total de 25 trabajos se han presentado a la decimocuarta edición de los premios final de carrera de la Fundación Juan Arizo Serrulla, unos galardones que recompensan la originalidad, la innovación y la excelencia, en disciplinas vinculadas a la ingeniería de caminos, canales y puertos y al que solo pueden optar proyectos que han obtenido una calificación mínima de sobresaliente.

Los premios, con una dotación de 12.000 euros para el primero y 4.000 euros para cada accésit, fueron entregados el pasado 20 de noviembre en una ceremonia celebrada en la Universitat Politècnica de València.

Un espacio de uso público fue el protagonista en la presente edición. La ingeniera de caminos, Teresa Martínez Comes, obtuvo el máximo galardón por su trabajo fin de máster donde propone un edificio singular con un sistema estructural formado por vigas de madera cóncavas en forma de vientre de pez y una gran superficie diáfana para albergar una piscina olímpica y su graderío.

También se entregaron tres accésit a los trabajos de Salvador Gimeno Gil, Javier Valiente Mocholí y Carlos Ruano Cachinero. Los proyectos plantean el diseño estructural de una nave industrial en Algemesí, el proyecto de un pabellón polideportivo en Aldaia y la mejora de un enlace viario de la V-23 con la A-23 y la N-340 en Sagunt.

La Fundación Juan Arizo fue creada en memoria de Juan Arizo Serrulla, profesor de la ETS de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la UPV, con el fin de impulsar la actividad profesional de los mejores estudiantes de esta disciplina. Durante el acto la presidenta de la Fundación, Charo Arizo, ha valorado la alta calidad de los trabajos presentados y el papel de estos premios como estímulo a la investigación de excelencia.