Tercera condena a la trama Gürtel por la relación de privilegio que las empresas de Francisco Correa establecieron con la Generalitat y el Partido Popular. Tras las sentencias, ya firmes, por los contratos amañados de Fitur de 2005 a 2009 y el delito electoral en las elecciones de 2007 y 2008, se suma ahora la condena por usar la visita del papa a València en 2006 para repartirse mordidas.

La Audiencia Nacional comunicó ayer el fallo que condena a 19 de los 23 acusados iniciales por la adjudicación ilegal al Grupo Correa del contrato de suministro de pantallas, sonido y megafonía para retransmitir al mundo la visita de Benedicto XVI a València con motivo del V Encuentro de la Familia, celebrado en Valencia los días 7, 8 y 9 de julio de 2006, cuatro días después del accidente del metro de València.

El fallo impone las mayores condenas a los cabecillas de la trama Gürtel por los delitos de malversación, fraude a la administración pública, falsedad de documento oficial y mercantil, blanqueo, contra la Hacienda Pública y cohecho activo: Francisco Correa (13 años y siete meses de cárcel), Pablo Crespo (15 años y 5 meses) y Álvaro Pérez «El Bigotes» (6 años y 9 meses). Pero también condena a ocho exdirectivos de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) por impulsar o colaborar en el amaño del contrato para la retransmisión de la visita del papa que fue un paripé de principio a fin, según se declara probado en la sentencia. Por estos hechos han sido condenados el exdirector de RTVV, Pedro García Gimeno (6 años y 9 meses de cárcel); el exdirector económico de RTVV Ricardo Calatayud (1 año y 10 meses); el exdirector de antena de RTVV, Antonio de la Viuda (2 años y 6 meses); Juan Prefaci (2 años y 6 meses), Vicente Sanz Monlleó (2 años y 6 meses), José Llorca Bertomeu, presidente de la mesa de contratación (1 año y 10 meses); Salvador Íñiguez (2 años y 6 meses) y la letrada de los servicios jurídicos de RTVV Encarna Pérez Pallarés (2 años y 6 meses).

La responsabilidad penal se ha extinguido para dos de los acusados que fallecieron durante y después del juicio: el exconseller Juan Cotino, considerado el «factótum» de esta trama, y el exjefe técnico de RTVV, Luis Sabater.

Reparto de mordidas

La sentencia considera probado que de los 7.493.6000 millones (IVA incluido) que pagó RTVV por el contrato para la retransmisión de la visita del papa, 3,2 millones fueron sobrecostes que se repartieron los cabecillas de la Gürtel con las empresas pantalla y el director de RTVV, Pedro García Gimeno, que recibió 500.000 euros en mordidas y regalos como el usufructo de un Minicooper.

La estrecha amistad entre Álvaro Pérez «El Bigotes» y Pedro García Gimeno fue «fundamental» para que la Gürtel se hiciera con el jugoso contrato de la retransmisión de la visita del papa, con la complicidad de miembros del patronato de la Fundación V encuentro mundial de las familias (Fvemf)».

Se llegó a suscribir un convenio entre RTVV y la Fvemf, suscrito entre Pedro García y el obispo Esteban Escudero (investigado en la causa del papa que se investiga en València). Un acuerdo que no resultaba necesario ya que, como asegura la sentencia, «RTVV no necesitaba ningún Convenio para informar de un evento que se iba a celebrar en un espacio público».

La única utilidad que tuvo este convenio fue que RTVV asumiera «los gastos de equipamiento, montaje de las pantallas de vídeo, sonido y megafonía del evento sin percibir ninguna contraprestación» cuando tales gastos «correspondían a la fundación organizadora del mismo, pero en ningún caso a RTVV». Los magistrados declinan actuar por falso testimonio contra Francisco Camps y el sacerdote Antonio Corbí.