Las organizaciones falleras han pactado la carta a enviar a la consellera de Sanitat, Ana Barceló, para solicitar que los casales falleros puedan equipararse a espacios culturales y salgan de la limitación actual, que no permite más que reuniones de seis personas, al considerarlo un espacio social.

Interagrupación, Juntas Locales y Junta Central Fallera plantean, de esta forma, que los casales son un espacio que merece ser equiparado a teatros, cines y museos, atendiendo a que desarrollan una labor cultural y de preservación del patrimonio tradicional. Viene en ese sentido, que ni pintado que este debate coincide con el aniversario de la declaración de las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Dicho de otra forma, que no se plantea la utilización de estos locales para celebración de cenas y actos gastronómicos. La sutil línea que separa los actos falleros que son de fiesta sin más de los que tienen un componente formativo. Y que, en ese caso, permitiría desarrollar algunas de las actividades que están paradas o que amenazan incluso con el bloqueo, incluyendo los ensayos de teatro. Pero la petición va más allá: la apertura de los casales los consideran como básico para mantener la tensión en las bases sociales. En las que, en caso contrario, puede cundir el desánimo y, por consiguiente, la caída de componentes y, por efecto dominó, la puesta en peligro de esas tradiciones y esos patrimonios culturales que, tal y como defienden, preservan las fallas.

Se defenderá, además, que desde que a finales de verano se estableció los límites de aforo, las comisiones han exhibido un notable celo a la hora de cumplir las normas de prudencia sanitaria.

Mientras, continúan las gestiones para, con el paso del tiempo y el desarrollo de la pandemia, trazar lo más parecido a un calendario más o menos reinventado de la fiesta. Que la primera fase de la vacuna se prolongue hasta finales de marzo hace prever que plantar las Fallas en condiciones lo más «normales» posibles será más viable en mayo o julio, pero no por ello se ve imposible hacer actividades en marzo dentro de las limitaciones que haya.