Varias semanas después de haberse anunciado, las instalaciones de la vieja Fe en el complejo hospitalario de Campanar volvieron el miércoles por la tarde a recibir pacientes, en este caso enfermos de covid-19 leves procedentes de los hospitales del área de Valencia más saturados y que necesitan liberar camas.

Según confirmaron fuentes de la Conselleria de Sanidad, el miércoles por la tarde se trasladó a los primeros pacientes y ayer jueves a otros cinco, con lo que la cifra total de enfermos en las antiguas instalaciones de la Escuela de Enfermería rondaría la decena. Desde Sanidad no han explicado, sin embargo, por qué se ha tardado cuatro semanas en recurrir a este recurso —que ya se utilizó en la primera ola— como alivio a la saturación de los hospitales y es ahora cuando se activa, cuando la curva ya está de bajada y la cifra de personas ingresadas ha bajado desde mediados de mes un 25 %. Cabe recordar que para la primera ola se decidió invertir en rehabilitar parte de las instalaciones de esta antigua escuela y se crearon 166 habitaciones para pacientes leves de las que se tenía que ocupar personal derivado del área de La Fe, como 75 enfermeros, 75 TCAE, 10 celadores y 13 médicos especialistas.