Un nuevo brote masivo ha sido detectado en una residencia de la Comunitat, en este caso en València capital. Aunque más de un 40 por ciento de los residentes del centro de personas mayores y centro de día Palacio de Raga han dado positivo en las pruebas —concretamente 28— así como trece trabajadores que también están infectados, el cribado realizado por Sanidad el pasado día 1 de diciembre ha permitido detectar los contagios antes de que el virus se extendiera al resto de usuarios del centro.

Según fuentes de Gesmed (Gestió Socio Sanitaria al Mediterrani), que gestiona dicho centro desde el pasado 1 de marzo, ninguno de los ancianos ni los trabajadores presentaba sintomatología antes de la realización de las pruebas PCR, de ahí la importancia de estas pruebas periódicas que se están empezando a hacer en centros sociosanitarios de la Comunitat sin casos sospechosos como medida de prevención.

Uno de los 28 residentes del centro contagiados ha fallecido, aunque dicha persona tenía patologías previas severas, según indicaron ayer estas mismas fuentes. Asimismo ocho ancianos se encuentran hospitalizados y el resto de positivos son asintomáticos y fueron aislados inmediatamente en sus habitaciones.

Nada más conocerse los resultados de las pruebas PCR, con 28 residentes positivos y trece trabajadores, se activó el plan de contingencia y se amplió el espacio covid dentro de la residencia, indicaron fuentes del centro. Además, estas mismas fuentes sostienen que con el apoyo de la Conselleria de Sanidad, se ha reforzado el personal auxiliar y de limpieza del centro.

No obstante, los trabajadores aseguran que no hay un refuerzo real en la plantilla ya que solo se han enviado desde Sanidad a dos personas de enfermería y a un médico, con lo que no contaban, y la plantilla que no se encuentra de baja por covid o en cuarentena por contacto estrecho está doblando turnos para poder atender a todos los residentes. En el momento de producirse el brote había 65 plazas ocupadas y 56 trabajadores.

En este caso, los resultados de las pruebas se dieron apenas un día después de su realización a todos los residentes y al personal del centro. No obstante, la Fiscalía de València ha constatado las quejas de residencias donde critican el tiempo transcurrido entre que se les hace la prueba a las personas que han estado en contacto con un positivo y conocen los resultados, llegando en ocasiones a pasar hasta cinco días, en los que se siguen produciendo contagios.

«Debería de ser absolutamente prioritario que se dieran los resultados lo antes posible», remarcó la fiscal Ana Lanuza, quien destacó la medida positiva que ha empezado a implantar la conselleria de Sanidad con pruebas periódicas a los trabajadores de las residencias.

Tras los últimos datos facilitados ayer por la conselleria, con seis nuevas muertes en residencias, 782 ancianos han perdido la vida por covid desde que comenzó la pandemia en centros sociosanitarios de la Comunitat Valenciana. Asimismo se contabilizaron trece nuevos casos positivos de residentes y seis trabajadores.