Europa de las regiones, fomento del eje mediterráneo, cambio del sistema productivo, retener el talento... Durante una hora, Joan Romero, el catedrático de Geografía Humana de la Universitat de València, Joan Romero, desgranó varios puntos sobre los que tejer la próxima década. Sin embargo, advirtió de que por encima de todos ellos había algo más importante: el pacto. «Si no hay voluntad de llegar a acuerdos no hace falta una agenda para 2030», indicó en una videoconferencia organizada por la UV.
«Nuestro modelo de Estado obliga a la cooperación y la coordinación», enfatizó el director de la Cátedra Propsect CV 2030 quien lamenta que en los últimos años «ha aumentado la polarización en la sociedad». Sin embargo, se mostró optimista con los «acuerdos regionales» y apostó por «elaborar pactos en las periferias» porque «independientemente del color político las agendas son las mismas» y «eludir el núcleo de la polarización nacional».
Romero alertó de que la «única vía» para frenar el fenómeno de la capitalidad que lleva «a concentrar poder, riqueza, talento e inversiones es por el camino de la equidad». «Hay que revisar a fondo con criterios justicia social el reparto equitativo entre las comunidades autónomas, es la asignatura no resuelta».
El académico señaló seis puntos de acuerdo «clave» para la próxima década: el modelo económico, la educación, el modelo territorial, la gobernanza, el pilar social y cambio climático. De este, aseguró, «será nuestro rinoceronte gris igual que la pandemia ha sido nuestro cisne negro». De hecho, sentenció que uno de los problemas es que faltan «utopías que nos aglutinen», pero señaló al ecologismo y al feminismo «como las únicas posibles para la próxima década».
