La distribución farmacéutica asegura haber puesto a disposición de las administraciones públicas más de 30.000 rutas que recorren unos 574.000 kilómetros diarios, por si se requiere de su apoyo para distribuir la vacuna contra la covid-19 por el territorio nacional.

La Federación de Distribuidores Farmacéuticos (Fedifar) detalló a Efe que la longitud diaria recorrida «es el equivalente a 14 vueltas a la tierra», lo que permite que la frecuencia media de los repartos a las oficinas de farmacia sea de unos 3 diarios, con un tiempo de respuesta medio de unas tres horas.

La patronal asegura que la red logística del ámbito farmacéutico español es una de las mejores en cuanto a relación precio y efectividad, pese a que cerca del 40 % de las rutas no son rentables.

Siempre según sus datos, algunas comunidades autónomas ya se han puesto en contacto con entidades del sector que operan en sus respectivas áreas, como Andalucía, que contactó con Bidafarma; Extremadura con Cofares, Alliance Healthcare y Bidafarma; y Murcia con Hefame, entre otras.

Por ejemplo, tras la irrupción de la pandemia Cofares, la mayor cooperativa de distribución farmacéutica de España por cuota de mercado, reforzó sus 1.500 rutas de distribución habituales con otras 75 para mejorar su servicio. Además, para la distribución a la red hospitalaria de todo el territorio nacional, amplió también las entregas a dos diarias.

Más gastos

La pandemia ha golpeado muchos sectores, entre ellos, el de la distribución farmacéutica, que, entre otros efectos, ha tenido que incrementar sus gastos para adaptar su operativa a las exigencias sanitarias demandadas por las autoridades.

El presidente de la patronal, Eladio González, explicó a Efe que se han tenido que crear turnos separados para reducir riesgos, igual que en muchos otros sectores industriales y de reparto, lo que derivó en un aumento del coste de las plantillas.

«Por lo demás, se ha logrado dar un suministro correcto, han llegado todos los medicamentos de forma habitual a todas las oficinas de farmacia, a pesar de los momentos críticos de la pandemia», aseveró.

Según Jesús Porres, director general de Bidafarma (la segunda mayor cooperativa de distribución farmacéutica en España), al comienzo de la crisis sanitaria hubo cierta «psicosis» para adquirir determinados medicamentos y productos de protección, lo que supuso un incremento importante de la demanda a la que tuvieron que responder para dar servicio a la población.