Las reuniones y comidas familiares durante la Navidad, las compras navideñas en centros comerciales abarrotados pese a las limitaciones de aforo y un mayor número de desplazamientoscierre perimetral mediante— durante las fechas festivas se han traducido, como demuestran los datos, en el peor momento por cifra de contagios y número de hospitalizaciones en la Comunitat Valenciana desde que comenzó la pandemia. Y parece que el pico alcanzado ayer con 6.240 casos —2.000 más que el día anterior— va a ir a más pues todavía falta por ver los efectos de la segunda semana navideña, fin de año y cabalgata de Reyes incluida.

«Vamos a vivir semanas extraordinariamente complicadas», advertía ayer el ‘president’ de la Generalitat, Ximo Puig, quien no descarta un posible confinamiento domiciliario de todos los valencianos, tras ser preguntado sobre dicha medida excepcional en una entrevista en el programa ‘No es un día cualquiera’ de RNE. Así, Puig hizo un llamamiento para «quedarse en casa» porque, según insistió, en condiciones de pandemia «hay que ser lo más prudentes posible». Además, remarcó que la corresponsabilidad «es la única manera» de hacer frente a la covid-19. «No vamos a poner un policía detrás de cada persona», argumentó.

Por segundo día consecutivo la Comunitat Valenciana registró el sábado una nueva cifra récord de contagios de coronavirus con 6.240 casos, lo que está suponiendo una mayor presión en los centros sanitarios, que han suspendido la actividad quirúrgica no urgente. Según los datos de la Generalitat, la cifra total de positivos se sitúa actualmente en más de 171.000 personas.

Hospitales al borde del colapso

Los hospitales valencianos están saturados y la situación en Urgencias por la entrada de nuevos contagios está desbordando al personal sanitario. Según la última actualización de datos, 2337 personas permanecían ingresadas por covid (cinco más que el día anterior). De ellas 352 están en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), también al borde del colapso en varios centros hospitalarios. Por provincias, en Valencia hay 1.395 hospitalizados, 202 en la UCI; 747 personas en la de Alicante, con 123 en UCI; y195 en la provincia de Castelló, con 27 pacientes en UCI.

Además, se han notificado 32 nuevos brotes,18 de ellos en la provincia de Valencia, nueve en Alicante y cinco en la provincia de Castelló. La gran mayoría de estos brotes son contagios de origen social, salvo dos importantes brotes de origen laboral en Orihuela, con once positivos, y València, con siete casos.

Este incremento de la incidencia acumulada ha propiciado que la Conselleria de Sanidad haya suspendido toda actividad quirúrgica programada, salvo para aquellas condiciones urgentes no demorables ni derivables como medida de refuerzo en respuesta a la pandemia.

Dificultades por el temporal

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En el peor momento por número de contagios desde que comenzara la pandemia, se han sumado también las condiciones climatológicas como consecuencia del temporal. El presidente Ximo Puig reconoció que en este momento «se dan circunstancias y días muy difíciles para la superación de la pandemia» pero expresó su convicción de que se va a garantizar que el proceso de vacunación continúe en las poblaciones más afectadas por el temporal ‘Filomena’.

Además, indicó que a finales de la semana que viene se habrán suministrado todas las existencias de las vacunas de Pfizer con las que actualmente cuenta la Generalitat y que el próximo martes habrá finalizado el proceso de vacunación en todas las residencias de la Comunitat, excepto aquellas que tienen brotes activos, y que ya se ha iniciado en centros de salud y hospitales. En este sentido, Puig defiende que se está suministrando este activo «de la manera más rápida y eficaz posible».