Nueva vuelta de tuerca a las medidas para frenar el avance de una tercera ola que sigue disparada en la Comunitat Valenciana. A partir de mañana y durante los próximos 14 días, bares y restaurantes no abrirán salvo para servicio a domicilio, el comercio que no sea esencial cerrará a partir de las seis de la tarde y todas las instalaciones deportivas estarán clausuradas. Todo, a la espera de que el Gobierno de España acepte modificar el límite del toque de queda, en cuyo caso, la restricción de movilidad nocturna se adelantaría desde las diez a las ocho.

La de ayer fue la sexta ocasión en los últimos tres meses en la que el president de la Generalitat, Ximo Puig, y la consellera de Sanidad, Ana Barceló, comparecían para anunciar nuevas restricciones. Una «adaptación constante» que se encuentra con los peores datos de toda la pandemia, una situación «grave», en palabras de Barceló, que ha duplicado la incidencia en las últimas dos semanas y que llega 12 días después de las últimas medidas tomadas.

«Hemos visto que las medidas han sido insuficientes», expresó Puig para defender la necesidad de «actuar con contundencia». Así, si los anteriores anuncios supusieron una reducción gradual de aforos y la aplicación de limitaciones horarias para la hostelería, que hasta ahora tenía a las cinco de la tarde su máximo de apertura, ayer se acordó por primera vez el cierre generalizado de los establecimientos como hicieran otras autonomías en otoño.

Bares y restaurantes solo podrán subir la persiana para servicios de llevar o recoger comida, aunque sí que mantendrán su actividad con las restricciones previas los restaurantes de hoteles (solo para sus alojados), los comedores escolares y universitarios, las cafeterías del hospital para profesionales y acompañantes de enfermos y las áreas de servicio de las autovías y autopistas.

La decisión de cierre de la hostelería se toma un día después de que el jefe del Consell anunciara el Plan Resiste, «el más importante de España» para el sector de la hostelería con 340 millones de euros. «Adoptamos estas medidas con dolor y dispuestos a compensar», añadió ayer Puig al tiempo que aseguró que se trata de «suturar una herida enorme con consecuencias importantes».

El resto de comercios también se verán afectados por las nuevas restricciones. Todos aquellos negocios que no sean considerados esenciales tendrán que dejar de atender a partir de las seis de la tarde, un hecho que obliga también al cierre de las grandes superficies comerciales. Entre los comercios que se consideran esenciales están tanto las tiendas de alimentación como las farmacias, que sí que abrirán en el horario que lo hacían hasta ahora.

La clausura se extiende a su vez a las instalaciones deportivas (excepto para los profesionales y las competiciones estatales) y a los clubes sociales y de ocio. En las residencias de estudiantes se establece un aforo máximo del 30 % en las zonas comunes y se prohíben las visitas mientras que los exámenes universitarios por los que fue preguntado Puig seguirán con la presencialidad como hasta ahora «dentro del plan de contingencia». También mantendrán su actual funcionamiento cines y teatros.

Reuniones de seis personas

Todas estas medidas más la que ya estaban en marcha como la limitación de reuniones sociales a seis personas o el perimetraje de la autonomía suponen, en opinión del president de la Generalitat, que la ciudadanía valenciana viva en un «semiconfinamiento». Sin embargo, el dirigente socialista puso encima de la mesa la posibilidad de establecer todavía más limitaciones como es adelantar el toque de queda, aunque descartó el confinamiento domiciliario al ser una «medida extrema que solo puede decretar el Gobierno de España».

En este sentido, Puig anunció que la Generalitat se sumará a otras autonomías como Castilla y León y solicitará al Ejecutivo estatal en la reunión de hoy del Consejo Interterritorial que se le permita avanzar el toque de queda de las 10 a las 8 de la tarde. En caso de que el ministerio dé luz verde a la petición, las 8 de la tarde será hora a la que se fijará la restricción de movilidad nocturna para la Comunitat Valenciana.

Las instalaciones deportivas quedan en exclusiva para los profesionales


Las instalaciones deportivas son otro de los espacios que se verán clausurados durante los próximos 14 días por culpa del avance de la pandemia. Entre las medidas anunciadas ayer por la Generalitat se incluye el cierre de los gimnasios y de las pistas deportivas tanto de recintos municipales como de clubes privados.


El cierre de este tipo de recintos no afectará a los profesionales del deporte ni a las competiciones oficiales de carácter estatal, pero sí que supondrá el cese del deporte base. En la última adaptación de medidas anunciada el pasado 7 de enero ya se suspendieron las competiciones para los menores de 12 años. 

Los locales festeros no podrán abrir ni para un límite de seis personas


Las medidas contra la covid-19 afectan de nuevo a las entidades festeras y sus locales. Así, según expresó ayer la consellera Ana Barceló, todos estos establecimientos de reunión de asociaciones como peñas, cofradías o agrupaciones falleras tendrán que permanecer cerrados durante los próximos 14 días a partir de mañana.


Hasta ahora, en estos locales se permitía desde el pasado noviembre un número máximo de 6 personas, excepto para funciones propias de gestión y administración, pero que no podían abrir al público en ningún caso. También quedarán cerrados espacios como centros recreativos de mayores, bares de jubilados, ludotecas y centros de ocio juvenil.