La Conselleria de Sanitat Universal y Salut Pública decidió ayer evacuar a los 20 pacientes que se encontraban ingresados en el hospital de campaña instalado junto a La Fe de València ante les fuertes rachas de viento que los últimos días se han registrado en la ciudad por el temporal Hortensia. Algunos de los enfermos habían mostrado su malestar, tanto por la temperatura del interior del recinto como por el ruido que provocaban las lonas que cubren la estructura movidas por el viento, especialmente durante la noche. Desde la administración autonómica aclaraban ayer, a su vez, que no se habían llegado a producir daños en la estructura, en los elementos del recinto ni tampoco en el aislamiento y que la decisión se tomó como «medida preventiva».

Desde Sanitat apuntaban que el traslado tenía como objetivo «aumentar las condiciones de confort» de los pacientes e indicaban que en cuanto pasen las actuales condiciones de fuertes vientos, los pacientes volverán al hospital de campaña.

En concreto, los pacientes fueron trasladados a las instalaciones del antiguo hospital La Fe de Campanar, en la zona que ocupaban las aulas de la escuela de enfermería.

Ayer por la mañana, antes de decidir el traslado de los pacientes, operarios de la Generalitat habían hecho una revisión general al recinto, según explicaron las fuentes a este periódico. Entre otras acciones, se repasaron los tensores y las cremalleras de las carpas y se ajustó la temperatura de la calefacción tras las quejas de los pacientes.

Actualmente, el hospital de campaña de la provincia de València contaba con 20 pacientes, lo que supone una ocupación de entorno el 6%.

El recinto tiene capacidad actualmente para acoger hasta 120 pacientes, aunque se puede ampliar hasta los 356. Los enfermos que se trasladan a los hospitales de campaña son aquellos que presentan un estado leve o moderado después de haber permanecido ingresados anteriormente en algún centro hospitalario. Los enfermos empezaron a llegar a las carpas hace apenas una semana con el objetivo de descongestionar los hospitales, que se encuentran muy saturados debido a la pandemia.

El pasado sábado entró en funcionamiento el de Castelló con ocho pacientes y capacidad para 80, lo que hacía que los tres recintos de los que disponía la Comunitat Valenciana, que se instalaron durante la primera ola de la pandemia, estuvieran en funcionamiento. En el de Alicante, según la última actualización de la Conselleria de Sanitat, hay 29 ingresados, lo que supone una ocupación del 11,9%. Este recinto tiene capacidad para albergar hasta 247 camas.

Críticas de PP y CS

Tanto el PPCV como Ciudadanos lanzaron ayer críticas contra los hospitales de campaña tras conocer el traslado de pacientes. La presidenta popular, Isabel Bonig, recordó que «ya advertimos que el hospital de campaña no reunía los requisitos para acoger pacientes» y aseguró que «como los ‘ximoanuncios’ se lo ha llevado el viento». Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Toni Cantó, criticaba que la Generalitat «ha gastado 16 millones de euros en tres hospitales de campaña que no sirven para nada» y reprochaba que que el ‘tripartito’ «siga sin aceptar la ayuda y coordinación con la sanidad privada». En respuesta a estas críticas, el síndic del PSPV, Manolo Mata, lamentaba que PP y Cs «no hagan más que frivolizar y, en días como estos, repugna el tipo de oposición que hacen». Además acusaba a estos partidos de buscar chascarrillos».