El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha asegurado este viernes en relación a las cifras de contagios de covid-19 que la Comunitat Valenciana está "en un proceso de leve descenso, aún muy leve", pero que "la situación sigue siendo muy complicada" y la Comunitat no se puede permitir "ninguna relajación".

    El president ha realizado estas declaraciones en Torrent, donde ha visitado las obras de construcción de un nuevo puente sobre el barranco de Chiva, al ser preguntado por el segundo fin de semana consecutivo de cierre perimetral de las grandes ciudades y el cierre de la hostelería.

    "Estas restricciones están previstas hasta el 15 de febrero. Seguimos en un momento muy álgido de la pandemia y hemos de apretar el acelerador colectivamente, desde las instituciones y también cada ciudadano", ha subrayado.

    Tras expresar su agradecimiento a la sociedad valenciana por su esfuerzo, Puig ha asegurado que "se está viendo el resultado, están bajando los contagios y el estrés hospitalario, que todavía es muy grande".

    Sin embargo, ha insistido en que "cuanta menos movilidad, menos contagios, y esto es lo que hay que hacer en estos momentos. Ya haremos lo que nos gusta dentro de unos meses. Ahora toca asumir la responsabilidad, y creo que eso lo tiene interiorizado la mayoría de valencianos", ha finalizado.