Enero fue un mes con un tiempo marcado por los extremos en la Comunitat Valenciana. La primera quincena fue la más fría de la serie histórica, mientras que la segunda fue la más cálida desde 1950, según los registros de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La delegación territorial detalla que este enero ha sido, en general, húmedo y térmicamente normal en la Comunitat Valenciana, en tanto y cuanto los valores se encontraban cercanos al promedio histórico. La temperatura media fue de 7,9 ºC, es decir 0,1 ºC inferior que el registro de referencia, y la precipitación acumulada fue de 58,8 l/m2, que es un 40 % superior que la del promedio climático del periodo 1981-2010 (42,1 l/m2).
El término normal es empleado internacionalmente como que el promedio de temperatura del mes ha estado cercano a determinadas condiciones de referencia, que por convenio se ha establecido que sea la media del periodo 1981- 2010. «Es importante hacer esta precisión porque el mes ha sido térmicamente extraordinario, con una gran diferencia entre la primera y la segunda mitad del mes», explica la delegación territorial de Aemet.
Así, la primera mitad del mes tuvo una temperatura media de 4,0 ºC; fue la primera quincena de enero más fría de la serie histórica, solo por detrás del mismo periodo de enero de 1985. La segunda mitad tuvo una temperatura media de 11,6 ºC ,y fue la segunda quincena de enero más cálida de la serie histórica que comienza en 1950. Las mínimas y las máximas tuvieron un comportamiento similar, aunque los días tuvieron una anomalía ligeramente inferior a la de las noches (-0,2 frente a 0,0).
La amplitud térmica entre el día más cálido (16,9 ºC el día 28) y el día más frío (2,3 ºC el día 8), fue de 14,6 ºC, y entre los valores extremos del mes registrados en las estaciones de la red de Aemet la amplitud térmica llegó a 45,3 ºC, que es la diferencia entre la máxima registrada en Alicante el día 29, 29,8 ºC, y la mínima en Ademuz el día 12, -15,5 ºC.
A partir de la mitad de mes cambió la situación meteorológica y comenzó a soplar viento de poniente, templado en origen, y que a la Comunitat Valenciana llega reseco y recalentado. Las temperaturas fueron ascendiendo hasta alcanzar el pico cálido los días 28 y 29, cuando se llegaron a rozar los 30 ºC en el observatorio de Alicante; 29,8 ºC el día 29, que es la temperatura más alta registrada en enero en este observatorio desde que hay registros.
Los efectos de la borrasca Filomena fueron muy adversos, aunque en general no tanto como los sufridos durante los temporales invernales de los años 2017 y 2020. En la C. Valenciana puntualmente hubo observatorios como Atzeneta del Maestrat que registró la nevada más adversa de los últimos 30 años, con 7,5 cm de espesor en la localidad.
