La derecha endurece su discurso y el Consell le echa en cara sus incoherencias

La oposición parlamentaria ha cargado con dureza contra el Botànic en la primera sesión de control al president de la Generalitat en las Corts en 2021 celebrada hoy jueves. La comparecencia de Puig llegaba con las cifras de contagiados de covid en leve descenso tras semanas descontroladas, pero los grupos de la oposición dispararon munición de grueso calibre contra el Consell y el presidente.

La síndica popular, Isabel Bonig, acusó al Ejecutivo de improvisación y de lanzar estafas y mentiras como los «hospitales voladores, la gran aportación del Botànic a la arquitectura sanitaria» o las obras «fantasma» de la antigua Fe, dijo. Bonig acusó a la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, sin citarla, de ser la «torquemada» del Consell y la «inquisidora mayor del reino» y aconsejó a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, que se cuide «y no asuma errores que no son suyos».

Más duro aún fue el portavoz de Ciudadanos, Toni Cantó, que llamó impresentables e inútiles a los partidos del Botànic, especialmente a Podem y Compromís. «Cambie de socios, señor Puig, despida ya de una vez a estos inútiles, hay gente que se está suicidando porque no puede pagar las deudas», remató, en un discurso que desde Compromís calificaron de populista y fascista y desde Podem vincularon con la campaña de las catalanas en la que Cantó participa. Puig y Morera pidieron que retirara los insultos, pero el líder de Cs no lo hizo.

Cantó también llamó a eliminar las restricciones a la hostelería algo que también defienden el PP o Vox, lo que en el Botànic consideran una contradicción porque sin restricciones se ha demostrado que no se puede frenar la pandemia. «A mayor movilidad, mayor contagio, se levantarán cuando epidemiológicamente sea posible», respondió Puig.

Barceló: «Son irresponsables»

Puig y la consellera de Sanidad, Ana Barceló, reprocharon a Bonig y Cantó que «trafiquen» con bulos y desinformación. «Cuando los contagios caen, dicen que hay opacidad y cuando aumentan es por mala gestión, ustedes dicen que una capilla se ha convertido en morgue y no es verdad, usan informes sin firmar, eso son bulos, son irresponsables y generan desasosiego», respondió Barceló.

Puig denunció más incoherencias en la derecha porque aún no sabe la propuesta del PP para salir de la crisis o qué modelo prefiere Bonig si el de Ayuso o el de Feijóo. «No vale venir aquí y contar unos chistes baratos», le dijo a Bonig y remarcó que no contribuirá a una política destructiva.