Además de los despidos y de los ERTE, la pandemia de coronavirus que asuela el mundo desde finales de 2019 ha tenido como otro de sus efectos más dañinos para la economía el haber provocado un alza inusitada en las bajas laborales, tanto por los contagios directos como por las cuarentenas a las que se han visto obligados muchos trabajadores por haber estado en contacto con infectados. Los últimos datos del Instituto Nacional de Seguridad Social son elocuentes al respecto. El número de ciudadanos de la Comunitat Valenciana que tuvieron que pedir la incapacidad temporal por culpa de la covid-19 ascendió a 186.431 entre enero y noviembre del año pasado.

La magnitud del dato se calibra una vez que se realiza la suma de todos los procesos de Incapacidad Temporal (IT) iniciados en dicho período. Son 590.986, una vez añadidos a los de la covid los 14.797 de autónomos, los 300.325 de contingencias comunes y 59.251 de las profesionales. Aunque el ministerio de Inclusión no dispone aún del dato de diciembre, la cifra citada está un 22 % por encima de las 481.793 bajas laborales que se contabilizaron en la Comunitat Valenciana durante todo 2019.

Comparación

Las 186.431 incapacidades temporales causadas por la covid son, pese a todo, un dato no excesivamente malo si se lo compara con los de otras autonomías. El efecto poblacional y de PIB es determinante y en ese sentido la Comunitat Valenciana mantiene su tradicional cuarta posición en el escalafón nacional, en este caso en el número de damnificados, tras Cataluña (505.905), Madrid (424.751) y Andalucía (245.573). No obstante, es significativo lo cerca que está de ella el País Vasco (166.668), con menos de la mitad de habitantes.

Claro que la Comunitat Valenciana, tras los meses duros del confinamiento en marzo, abril y mayo, vivió todo el tramo final del año pasado con la pandemia relativamente bajo control, no como ha sucedido a partir de las navidades, que ha disparado los contagios que seguramente elevarán la cifra de bajas laborales.

Dentro de la Comunitat Valenciana, la provincia con mayor incidencia es la más poblada, es decir Valencia, con 106.553 casos, seguida por Alicante, con 57.481, y, por último, Castelló, con 22.417. La duración media de las incapacidades temporales en la autonomía se situó en 16,59 días, con una diferencia de casi un día entre Alicante (16,07) y Valencia (16,92). El dato de la Comunitat Valenciana es el más elevado del país si no se toma en consideración los de Madrid (17,15), Galicia (17,08) y Castilla-La Mancha (16,76).

Contingencias profesionales

Las largas semanas del confinamiento en la primera ola y las restricciones a la actividad económica que se han producido en los meses posteriores han propiciado que la incidencia del resto de enfermedades laborales se haya reducido de forma considerable. Así, las contingencias profesionales -aquellas que tienen su origen en el puesto de trabajo- han bajado de 67.476 en todo 2019 a 59.251 en los once primeros meses de 2020, mientras que las comunes, que se derivan de accidentes o enfermedades fuera del ámbito laboral, han pasado de 379.108 a 300.325. Por último, las bajas de los autónomos se han reducido de 35.212 a 14.979, más de la mitad.