La Generalitat Valenciana prevé cuatro grandes centros de vacunación masiva, uno en cada una de las tres capitales - València, Castelló y Alicante-, y un cuarto en Elx. Y al menos también se habilitará un espacio para inocular las dosis en cada capital de comarca de la Comunitat Valenciana. Así lo anunció ayer el president de la Generalitat, Ximo Puig, en una entrevista concedida a Europa Press.

La comisión de vacunación para tratar en qué lugares se establecerán estos centros se reunirá hoy sábado. La Generalitat creó a principios de mes un grupo de trabajo para localizar esos grandes espacios (como aparcamientos o instalaciones deportivas) donde acometer esa vacunación masiva como ya están haciendo Reino Unido o Estados Unidos. Como avanzó este diario, el Levante UD ofreció su remodelado estadio a Presidencia para cuando se inicie esta inmunización a lo grande, que se prevé para finales de marzo o abril, siempre que las entregas de las farmacéuticas no se retrasen, como ya sucedió con alguna remesa de Pfizer. Hoy se sabrá si el campo de fútbol «granota» es uno de los espacios donde se pinchará masivamente a los valencianos. Puig también indicó que los tres hospitales de campaña son espacios que «seguro que se van a utilizar».

El jefe del Consell defendió que la vacunación es el «gran activo» actualmente contra la pandemia. Según los cálculos de la Generalitat, la Comunitat Valenciana tiene garantizada la recepción de un mínimo de 559.020 vacunas contra la covid-19 hasta el 31 de marzo y que a partir de abril, si cumplen las farmacéuticas -insisten desde Presidencia-, empezará esa inmunización masiva. El ritmo lo marcará la entrega de las dosis.

Desde que empezó la campaña a finales de diciembre y hasta ayer, según los últimos datos actualizados, la Conselleria de Sanitat ya ha administrado un total de 256.111 dosis de la vacuna contra el coronavirus. Por provincias, 33.105 en Castelló, 92.535 en Alicante y 130.471 en València. Casi 100.000 valencianos han recibido ya las dos dosis. En concreto, 98.130 personas.

Puig añadió que espera que la vacuna de Janssen se apruebe a principios de marzo. Sería la cuarta autorizada, junto a las de Pfizer, Moderna y Oxford. Respecto a las actuales, el presidente lamentó la «insuficiencia de dosis», y remarcó la complejidad logística debido a la doble dosis, la refrigeración o el transporte. Pero sí que destacó la respuesta de la ciencia ante la pandemia, apuntando que, hasta ahora, «no llegaba a tres decenas de vacunas» para todas las enfermedades, y «en un año, la ciencia ha conseguido que haya un conjunto» de inyecciones para este coronavirus. Aunque se mostró concernido por las incógnitas que plantean las nuevas cepas y variantes respecto a la efectividad de los viales o la posibilidad de que haya que vacunar anualmente.

En cuanto a la celebración de las Pascuas y Semana Santa, el jefe del Consell apostó por alcanzar un acuerdo entre las comunidades y el Gobierno en el Consejo Interterritorial para limitar la movilidad en estas fiestas porque «va a ser un momento muy complejo» en el que incluso se podría «perder la trazabilidad» del virus que ya se está recuperando con la caída de casos actual. Ayer, la Incidencia Acumulada (IA) en España bajó por primera vez de 300 casos por cada 100.000 habitantes. Se situó en 294. Una cifra que no se notificaba desde la noche de Reyes, el pasado 5 de enero.

En la entrevista, Puig defendió ese acuerdo a nivel estatal para Semana Santa, ya que es una festividad que, como la Navidad, genera mucha movilidad entre autonomías. «Pensamos que debe haber una posición del conjunto del sistema, porque es muy importante consolidar ahora. Si consolidamos, probablemente los próximos meses tendremos más oportunidades de ir hacia la normalización con mayor vacunación y mayor capacidad de contención de la pandemia», explicó.

«Situación aún muy difícil»

En cuanto a la flexibilización de las restricciones a partir del 1 de marzo, Puig incidió en que no se puede «malgastar» el esfuerzo realizado en «unos pocos días», y reiteró que la situación todavía es «muy difícil» al estar «aún en un riesgo alto». Apuntó que se tomarán las decisiones el próximo jueves, cuando se reúna la Comisión Interdepartamental, que tendrá en cuenta el «semáforo» que establece el Consejo Interterritorial de Sanidad. Se prevé que, en los próximos días, «se vayan consolidando» los datos y haya una mayor «constatación de la bajada» de la incidencia. Ayer, la Comunitat Valenciana también se situaba en una IA por debajo de 300 puntos: 295,44 casos por cada cien mil habitantes, menos de un punto por encima de la media de España de 294,72.

Expertos piden bajar la ocupación de hospitales ante una posible cuarta ola

Los expertos y científicos que asesoran al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, advirtieron ayer de la necesidad de bajar la ocupación de los hospitales ante la posible llegada de una cuarta ola, que según algunos científicos, como la epidemióloga Margarita del Val, situarían a finales de marzo. Se trataría de llegar a esa nueva oleada con la menor presión asistencial posible, tanto en planta como en unidades de críticos.

Ayer, según los datos del Ministerio de Sanidad, los pacientes covid en planta ocupaban el 14 % de las camas en la C. Valenciana (la media nacional era del 12,83 %), un punto menos que la jornada anterior. Era la sexta de España con mayor ocupación.

Puig mantuvo ayer, junto con la consellera Ana Barceló, una nueva reunión con personas expertas de diferentes ámbitos para abordar la evolución de la pandemia. Según fuentes del Consell, los científicos también abogaron por el diseño de una desescalada «suave y con mucha cautela» para que no se vaya al traste la mejora generalizada de la situación sanitaria de las últimas semanas, ya que pese a la mejoría los datos siguen elevados, sobre todo en las unidades de intensivos. En las UCI, los pacientes con covid críticos suponen el 38,48 % de las camas de los hospitales.

Los expertos destacaron la corresponsabilidad de los valencianos en la reducción de los casos, pues es la población que ha cumplido de forma más masiva en España con las medidas de control adoptadas desde Navidad y la que más ha cambiado sus hábitos sociales para evitar contagios. Según los datos puestos sobre la mesa, se ha reducido casi en un tercio la gente que socializa en espacios de alto riesgo. En Navidad eran el 32 % y ahora representan solo el 12 %. «Supone el mayor descenso» de las comunidades.

De ahí que se deba insistir en concienciar a la ciudadanía para evitar un relajamiento en las medidas de protección a medida que se avance en la desescalada.