El movimiento Extinction Rebellion València se ha manifestado ante el Consulado de Noruega en València para protestar por "la represión a los activistas climáticos que recurren a la desobediencia civil". Según los integrantes del colectivo ambientalista, se "está arrestando a todos los involucrados en las protestas, aislándolos durante diez a quince horas con multas extraordinariamente altas". Aseguran que se les imponen sanciones de aproximadamente 1.600 euros. "Estamos sufriendo multas mucho más altas en Noruega que en otros países", aseguran.
Para los grupos que protestan, Noruega "es uno de los mayores contaminadores del mundo". "Con su pequeña población de 5 millones de habitantes, Noruega cubre el 2% de la demanda mundial de petróleo y el 3% de la demanda mundial de gas. Si se tienen en cuenta las emisiones involucradas en la exportación de petróleo y gas, Noruega es el séptimo mayor exportador de CO2 a la atmósfera", explican. "Como tal, Noruega no está cumpliendo de ninguna manera con sus obligaciones en virtud del Acuerdo de París", inciden.
La manifestación en el Consulado de Noruega en València es parte de una campaña internacional, en la que se están produciendo manifestaciones similares simultáneamente en otros países. En el mismo período de tiempo, Extinction Rebellion Norway se está manifestando en el Ministerio de Justicia en Oslo, para exigir que la policía muestre "proporcionalidad contra los manifestantes pacíficos que se manifiestan por un clima habitable".
"Noruega se enorgullece de respetar el derecho internacional. Exigimos que Noruega cumpla con sus obligaciones como signatarios del Acuerdo de París y la Convención Europea de Derechos Humanos, o que la comunidad internacional lo haga responsable como uno de los países más ricos del mundo con una responsabilidad desproporcionada por la crisis climática", manifiestan.
