Por un momento, los epidemiólogos han dejado de ser los médicos más buscados durante la pandemia para que lo sean los hematólogos. Los 30 casos de trombosis detectados hasta el momento en Europa sobre los más de cinco millones de personas vacunadas con AstraZeneca han provocado la suspensión de la administración de este fármaco, motivo suficiente para que los especialistas comiencen a recibir llamadas de la prensa y de amigos con dudas.
Según explica Edel Martí, responsable de la Unidad de Hemostasia y Trombosis del Hospital Clínico de València, un trombo es una coagulación de la sangre, es decir, cuando esta se queda en estado sólido en un punto sin poder circular y pueden ser tanto arteriales como en las venas (venosas).
«El factor es muy variado, es algo que hace que tengas más activada la coagulación, puede ser por un problema genético, por una circunstancia como una operación o por la ingesta de un medicamento».
En este sentido, Martí apunta a que mientras que «en 10 años jamás he visto una trombosis provocada por una vacuna, ni de adenovirus como la de AstraZeneca», sí que expresa que los anticonceptivos orales destinados a las mujeres o los tratamientos hormonales sí que tienen un aumento del riesgo en esta coagulación de la sangre y, por tanto, «un riesgo mayor de generar trombos».
De hecho, señala que uno de los efectos vistos en la covid son las embolias pulmonares. «Parece que el virus afecta a los vasos pulmonares y genera embolias», explica. No solo eso, sino que un estudio de la Universidad de Toronto alerta que un 2 % de los casos de covid desarrolla coagulación sanguínea. Si se aplica a la muestra de las cinco millones de personas vacunadas, esto significaría 100.000 casos de trombosis.
Los casos que han llamado especialmente la atención son los 11 de trombosis de senos venosos cerebrales que, según Martí, «es una afección rara». «De momento se está estudiando si existe una plausibilidad biológica, si la relación entre la vacuna y los casos de trombosis detectados es casual o causa», indica la experta quien valora que «ante cualquier evento después de la vacunación se reporte y quede registrado».
«El sistema de farmacovigilancia ante la vacunación funciona», expresa. Mientras tanto, asegura se trata de estar atentos a síntomas después de la vacunación. En el caso de la trombosis de senos venosos cerebrales es un dolor de cabeza invalidante a partir del tercer día acompañado de vómitos y dificultad de visión.
