España y la Unión Europea confían en la llegada de la vacuna monodosis de Janssen para dar el acelerón definitivo a la vacunación masiva para cumplir ocn los plazos impuestos. Sin embargo, la Agencia Europea del Medicamento (EMA), ha retrasado a «algún momento de abril» la distribución de esta vacuna La directora de la EMA, Emer Cooke, explicó ayer en una comparecencia en el Parlamento Europeo que las primeras dosis no llegarán a la Unión Europea hasta el mes que viene. Janssen ya había manifestado hace días problemas para cumplir con los plazos de entrega. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, había fijado para mediados de abril la llegada de las primeras dosis. Sin embargo, ese plazo queda ahora en el aire. Y con él se dilata aún más el proceso previsto de vacunación masiva.

Casi al mismo tiempo en que Cooke realizaba estas manifestaciones, la directora general de Sanidad de la Comisión Europea, Sandra Gallina, responsable de la compra de vacunas, Sandra Gallina, insistía en que Johnson & Johnson entregará a la UE las primeras vacunas a mediados de abril. «Puedo decir con bastante seguridad que las primeras dosis estarán a mediados de abril», dijo, puntualizando lo afirmado por la directora de la EMA. Bruselas confía en que la vacuna de Johnson & Johnson, de una sola dosis, permite acelerar la campaña de vacunación en la UE. La UE debía recibir 55 millones de dosis de esta vacuna antes de finales de junio, según el Ejecutivo comunitario. Se sumarían a las 200 millones de dosis que se esperan de Pfizer-BioNTech, a los 70 millones de AstraZeneca y a los 35 millones de Moderna. La previsión expresada el lunes por el comisario Thierry Breton es que a mediados de julio la población europea estará inmunizada.

La EMA está trabajando en «mejorar la disponibilidad y el suministro de vacunas autorizadas». En este sentido, Cooke confirmó que está en contacto continuo con las farmacéuticas para ver cómo aprobar puntos de fabricación y distribución adicionales en la UE. «Los datos que los respaldan se están enviando y examinando de forma continua y acelerada. También estamos buscando mejorar las condiciones de almacenamiento de algunas de las vacunas para facilitar la distribución y la logística», subrayó.

La Comisión Europea es consciente de la «frustración» que provoca el retraso en la llegada de la vacuna de AstraZeneca y ha vuelto a advertir de que no se quedará «de brazos cruzados» y utilizará todas las herramientas a su alcance para asegurar que la empresa anglosueca cumple con el contrato lo antes posible y entrega las dosis prometidas. «La Comisión Europea no va a permanecer de brazos cruzados. Vamos a utilizar todas las herramientas que tenemos para corregir la situación», afirmó Gallina, durante una intervención ante la comisión de control presupuestario del Parlamento Europeo. La alta funcionaria recordó que «hay muchas personas muriendo porque las vacunas no están llegando» y reprochó públicamente a la empresa producir solo en una de las cinco plantas que figuran en el contrato.

Uno de los puntos de discordia entre Londres y Bruselas es la fábrica neerlandesa Halix, que tiene firmado un contrato con AstraZeneca para el suministro de dosis, pero en el que también participó con fondos estatales el Gobierno británico, por lo que gran parte de las vacunas estarían destinadas al Reino Unido. Al encontrarse la fábrica en territorio comunitario, la UE amenaza con imponer un veto a las exportaciones de las vacunas fabricadas en Países Bajos. Halix todavía no tiene el visto bueno de la EMA como centro de fabricación de vacunas que se puedan distribuir en la UE, aunque AstraZeneca espera lograr su respaldo en las próximas semanas.

Inspecciones para la Sputnik V

En su comparecencia, Emer Cooke también se refirió a la vacuna rusa Sputnik V. Anunció que va a organizar inspecciones a la fábrica de Sputnik V, aunque todavía tiene «preguntas» sin respuesta sobre esta vacuna rusa. Explicó que los científicos europeos están «analizando la vacuna Sputnik V», han estado en conversaciones con los representantes del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) -que desarrolló el fármaco- y siguen con el proceso de revisión continua. «Estamos en proceso de evaluación, de organización de inspecciones, y esperamos que esta sea una vacuna valiosa para agregar a las ya disponibles para la población europea y que obtenga una autorización basada en los mismos estándares de seguridad, calidad y eficacia que aplicamos para cada vacuna», dijo Cooke.