«Ordenar y no prohibir». Es el mensaje que lanzan desde la Coordinadora en Defensa de los Bosques del Túria respecto a la nueva polémica suscitada entre los usuarios de bicicletas de montaña (BTT) y la Conselleria de Emergencia Climática, quien ha sacado adelante la Declaración Ambiental, Territorial y Estratégica (DATE) del PORN del Túria sin incluir el uso de las sendas por parte de los ciclistas.

Las alegaciones que presentaron al plan fueron estimadas por la Administración, por lo que consideraron que esta vez sí les dejarían transitar por las sendas del parque natural.

No fue así y ahora, la coordinadora se alinea en la misma posición que la conselleria: ordenar los caminos, vías y senderos para distribuirlos entre los usuarios del parque. La representante de los ecologistas, María Mayoral, abogó por abrir un diálogo entre la Administración, la dirección del Parque Natural y las partes implicadas para llegar a un acuerdo.

«No estamos dispuestos a que las BTT vayan por donde quieran y puedan destrozar la flora endémica del parque. Hay que hacer sendas para ellos y si es posible, hacerlas paralelas a la vía que discurre por el parque fluvial donde haya espacio», consideró Mayoral. Para ello es importante eliminar las cañas que rodean el camino para que sea más ancho.

Lo que parece claro es que senderistas y bicicletas de montaña no pueden usar la misma vía. La rapidez que emplean en la práctica del deporte lo hace incompatible, «pero hay que diferenciarlas de las bicicletas de paseo, con las que se puede convivir», señaló Mayoral.

Además, recordó que el Túria tiene su fauna y flora «y hay que respetar el hábitat de estos seres vivos». Además, se suma la particularidad de que este parque, debido a su cercanía a grandes urbes, tiene una gran afluencia de personas, por lo que «hay que protegerlo aún más», consideró Mayoral.