El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha afirmado que la voluntad es llegar al 9 de mayo, fecha en que decae el estado de alarma, "en las mejores condiciones posibles" y que fuera posible levantar el cierre perimetral de la Comunitat Valenciana, pero ha advertido de que las restricciones se han demostrado eficaces y hacer predicciones es complicado.

Puig, que se ha manifestado así en una visita, junto a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, a las obras del centro sanitario Roís de Corella de Gandía, ha avanzado que la próxima semana el Consell realizará una primera evaluación de la situación, tras la Semana Santa, aunque todavía no se dispondrá de los datos de 14 días de la Pascua.

"Vamos a continuar con la máxima prudencia y sin generar falsas expectativas -ha dicho- porque ahora estamos en una situación muy positiva gracias al esfuerzo de la sociedad y al proceso de vacunación pero aun lejos de tener un horizonte de Comunidad Valenciana Covid 0".

Puig ha señalado que se ve con mucha preocupación la evolución del coronavirus en Europa, donde la situación se ha vuelto ahora difícil en países que se estaba conteniendo como Francia, y más teniendo en cuenta la dependencia turística de España de los países europeos.

Hacer predicciones es complicado pero la voluntad, ha dicho el president, es llegar al 9 de mayo, cuando decaerá el estado de alarma declarado por el Gobierno, "en las mejores condiciones posibles" y que fuera posible el levantamiento del cierre perimetral, que está provocando distorsiones en muchas personas.

No obstante, ha asegurado que las restricciones son "el antídoto para conseguir la máxima capacidad de respuesta preventiva" ante los contagios, y "se han demostrado eficaces"