El Consell tiene previsto reunir mañana la comisión interdepartamental sobre la pandemia para estudiar las restricciones a partir del próximo lunes, cuando vencen las actuales. No son previsibles cambios importantes en la movilidad, a pesar de la baja incidencia del virus en la C. Valenciana en este momento. Es lo que se puede deducir de las declaraciones ayer de los principales cargos del Ejecutivo. Y en esa línea se manifiestan también fuentes de Sanidad.

El president de la Generalitat, Ximo Puig, dijo ayer: «Este jueves valoraremos con los expertos cómo está la situación, pero cualquier desescalada deber ser con muchísima prudencia porque tuvimos un comienzo de año terrible».

Habrá previsiblemente alguna retoque en las limitaciones, señalan fuentes del Ejecutivo, pero no está el contexto español e internacional en este momento para abrir la mano y permitir una mayor libertad. Eso es lo que piden algunos de los sectores más afectados, como la hostelería, que en la actualidad tiene restringida su actividad hasta las 18 horas.

La vicepresidenta del Gobierno autonómico, Mónica Oltra, señaló por su parte que la comisión interdepartamental decidirá cómo será la desescalada guiados «como siempre por la prudencia», atendiendo a los datos de contagio de ese mismo día y la evolución de los últimos 7 y 14 días, así como al ritmo de vacunación.

Oltra recalcó que las decisiones estarán «guiadas como siempre por la prudencia y la salvaguarda de la seguridad y de la vida». Aunque «es cierto que la C. Valenciana es la que menos» incidencia tiene de España, «la tendencia en Europa y España apunta a que están aumentando los contagios», argumentó.

A favor de relajar alguna medida está el avance en el proceso de vacunación, que «coge velocidad de crucero. En este sentido, Oltra destacó que la Comunitat Valenciana es «la que más vacunas ha puesto de las que han llegado y, si no se ponen más, es porque no llegan más».