La Conselleria de Sanidad ha abierto un expediente informativo, a través de la Dirección General de Recursos Humanos, para determinar si se ha podido producir alguna irregularidad en la administración de la vacuna contra el coronavirus en el Hospital de la Malva-rosa, en València, según adelantó ayer la agencia Efe.
Según fuentes del departamento que dirige Ana Barceló, la Dirección General de Recursos Humanos recaban informes y realiza diligencias de investigación por si algún profesional sanitario ha podido cometer una irregularidad en el proceso de vacunación. Esta supuesta irregularidad se habría cometido en el punto de vacunación habilitado en el Hospital de la Malva-rosa esta misma semana, según ha podido saber Levante-EMV.
Los hechos que se investigan consistirían en que durante el proceso de vacunación de uno o varios viales utilizados en la inoculación las dosis sobrantes se habrían administrado, supuestamente, a personas no citadas previamente, sino a personas cercanas, familiares o amigos de algún sanitario presente en el momento de la administración.
Como el proceso de vacunación requiere que se registre todo el proceso, los datos completos de la persona inmunizada y hasta la serie de la vacuna que ha sido inoculada, el rastreo de la presunta irregularidad en la administración de las vacunas es relativamente sencillo.
La Comunitat Valenciana inició el pasado 27 de diciembre la vacunación contra la covid-19 y durante las primeras semanas se abrieron varios expedientes desde la dirección general de Recursos Humanos (por si algún profesional sanitario había cometido irregularidad) y desde Salud Pública (por si se había vacunado a personas que no tocaba), tras detectarse casos susceptibles de ser investigados.
La Conselleria de Sanidad llegó a contabilizar hasta 233 personas que podrían haberse saltado el turno de vacunación, aunque la lista se redujo a principios de febrero a 62 por la vacunación anticipada. Entre los señalados por «colarse» en el proceso previsto de vacunación se encontraban diez cargos públicos a los que se abrieron diligencias para determinar de quién fue la responsabilidad de que recibiera la vacuna.
La Conselleria de Sanidad notificó ayer un total de 149 nuevos contagios, lo que supone un descenso del 37,1 % respecto al número de casos producido el pasado miércoles cuando se notificaron un total de 237. En este rastreo también se han detectado 13 nuevos brotes (dos más que el miércoles de la semana pasada): dos en la provincia de Alicante, uno en la de Castelló y 10 en la provincia de Valencia. El total de contagios es de 53 personas por lo que la media por brote es de 4,08 personas. El más numeroso es el de Manises con siete positivos de origen social, según la Conselleria de Sanidad.
Unas cifras que permiten que la incidencia acumulada a 14 días de la Comunitat Valenciana estuviera ayer en 31,64 casos por cada 100.000 habitantes, 0,97 puntos menos que el martes que ascendía a 32,61 casos. Aunque este indicador se ha incrementado respecto a la semana pasada. Del miércoles 31 de marzo hasta ayer la incidencia acumulada ha aumentado en 3,56 puntos, de 28,08 a 31,64. A pesar de este incremento, la Comunitat Valenciana se sitúa 136,33 puntos por debajo de la media española que ayer ascendía a 167,97 puntos.
Aunque el dato que alerta de que no hay que bajar la guardia es el de los 15 fallecimientos notificados ayer: nueve en la provincia de Alicante, cuatro en la de Castelló y dos en la de Valencia. También hay 393 personas hospitalizadas (13 menos) y 79 en las UCI (cuatro menos).
