El ocio nocturno de la Comunitat Valenciana coincide en que las distintas líneas de ayudas directas activadas por la Generalitat Valenciana para paliar las pérdidas de un sector que acumula más de un año cerrado no están llegando a la velocidad necesaria para asegurar la viabilidad de estas empresas. Sin embargo, las estrategias para denunciar esta situación son divergentes, como quedó constatado ayer.

Por un lado, la Coordinadora Empresarial de Ocio y Hostelería (Ceoh), que aglutina a 15 asociaciones de la autonomía, inició una acampada frente al Palau de la Generalitat para reclamar al Consell un plan de choque que «frene el sufrimiento y la ruina económica» de estos negocios y de sus trabajadores. Según los organizadores, las 13 tiendas que plantaron (por los 13 meses que acumulan sin actividad), «no se levantarán hasta que la Generalitat ponga sobre la mesa un verdadero plan de rescate» para un colectivo que, según la Ceoh, «arrastra pérdidas de hasta 300.000 euros en el caso de las discotecas y de 100.000 euros» en el caso de los bares de copas.

Pese al objetivo de presionar al Consell con esta protesta, la Ceoh no comunicó a las patronales del ocio y de la hostelería (Fotur y Conhostur, respectivamente), esta movilización para lograr su adhesión, según señala el presidente de la primera, Víctor Pérez. Estas dos organizaciones, las mayoritarias, son las que han estado presentes en las mesas de trabajo con el Ejecutivo valenciano tanto para diseñar la desescalada como los planes de choque.

También ayer, Fotur publicó los resultados de una encuesta realizada en el sector sobre la situación de las ayudas aprobadas por el Consell. Su conclusión es idéntica: el dinero no está llegando a los pubs y discotecas. Los mayores problemas, según el gremio, se han generado por la incompatibilidad de Cenae, por la obligatoriedad de registrar beneficios en 2019 o por el «excesivo papeleo» y el «silencio administrativo». Fotur volvió a reclamar un plan de rescate específico.

El TSJCV rechaza la reapertura de casinos

La sección cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana desestimó ayer el recurso de reposición de la Asociación Autonómica Valenciana de Empresarios de Juegos Legalizados (Ejuva) contra la decisión de la sala de mantener el cierre de las actividades de casinos, bingos y salas de juegos, dado que la resolución administrativa de Sanidad que había sido impugnada en este incidente cautelar ya no está en vigor desde este lunes. La asociación había recurrido contra la resolución de marzo de la conselleria, que acordaba mantener la suspensión cautelar de actividades de casinos, bingos y salas de juego. La sala hace notar, únicamente a efectos «dialécticos», que en este caso la ponderación de intereses debió haber conducido a satisfacer la medida cautelar instada por Ejuva, dado que no pidió levantar el cierre «sin más, sino la apertura bajo las condiciones de la resolución de diciembre.