El president de la Generalitat y secretario general del PSPV Ximo Puig ha radicalizado su discurso de repulsa democrática contra Vox después de la tormenta política generada por las amenazas de muerte contra el candidato de Podemos Pablo Iglesias, el ministro Alberto Grande-Marlaska y la directora general de la Guardia Civil María Gámez en las elecciones autonómicas de Madrid.

Puig dijo: “Reclamo la intolerancia con los intolerantes”, parafraseando al filósofo Carl Popper. Después de su intervención en el Comité Nacional del PSPV, calificó de “muy lamentable” lo ocurrido el viernes en el debate de la SER en Madrid y en los debates posteriores pero ante todo señaló: “Me preocupa la contaminación que produce la extrema derecha en la derecha”. Puig exigió que : “seamos capaces de poner a cada uno en su sitio y defender la democracia y la convivencia”. En ese sentido, “hay que exigirle a la derecha democrática que actúe como tal y que haga lo mismo que hace la derecha democrática en todos los países de Europa”, en el sentido de aislar a la derecha radical, en general, y a Vox, en particular.

Exige al Valencia CF, sin citarlo, que "cumpla sus compromisos"

Sobre otros temas de actualidad, el president remarcó sobre la ATE de Mestalla: “Deseamos lo mejor para el Valencia CF ya que es más que un club para la sociedad valenciana pero la ley ha de cumplirse y todo lo que está aprobado se ha de cumplir”. “El único camino posible -subrayó- es el cumplimiento de la legislación lo que espero es que a quien le corresponde – referido al club, sin citarlo- cumpla los compromisos derivados del pasado”. Y reiteró que no hay otra vía que el cumplimiento "de la ley y de la legislación".

La Missa d’Infants: “No va a a ser igual”

Sobre las celebraciones con motivo de la Patrona de los valencianos, el president del Consell recalcó: “La Missa d’Infants no podrá ser una Missa d’Infants como la que tradicionalmente vivimos pero la voluntad es que se pueda celebrar con la mayor seguridad posible”. En esa línea, “están trabajando la Conselleria de Sanitat y la Iglesia que están buscando la mejor solución” para que se pueda celebrar la fiesta “dentro de las dificultades” que marca la pandemia y teniendo en cuenta reiteró: “Que no va a ser igual” que otros años.