Un 70 %. Ese es el porcentaje en el que se ha situado la llamada inmunidad de rebaño, una proporción a partir de la cual la transmisión del virus iría descendiendo ya que se encontraría con las barreras de personas inmunizadoras que bloquearían su paso. Durante los primeros meses de la pandemia se habló de la posibilidad de llegar a este porcentaje de manera natural, pero que esta podría alcanzarse de manera artificial a partir de la administración de vacunas.

La vacunación en la Comunitat Valenciana avanza a un ritmo similar al de España y el resto de Europa con casi uno de cada cuatro valencianos y valencianas con al menos una dosis contra la covid. Son más de 1,1 millones de una población de 5, por tanto, esa inmunidad de rebaño se situaría en una vacunación de 3,5 millones (todos los mayores de 30) en el caso valenciano o de 33 millones de los 47 que habitan España. A nivel global debería ser vacunadas más de 5.300 millones de personas, de momento hay 570, la mayoría en países ricos (con una dosis).

Pero, ¿qué es la inmunidad de rebaño y por qué el 70 %? El experto en Salud Pública de la Fundación Fisabio, Salvador Peiró, indica que el umbral de la inmunidad de rebaño depende tanto del número básico de reproducción del virus (el famoso R0) como de la efectividad de las vacunas. "Cuanto más contagioso es un virus, mayor R0, y mayor es la proporción de la población que deberá ser inmune para bloquear la transmisión de forma sostenida", explica.

"Pero el umbral de inmunidad de rebaño puede variar con muchos factores", añade y desgrana ejemplos como la densidad y movilidad de la población y hábitos sociales. En el caso de la covid la R0 se estimó en 3, esto es, que cada caso podía contagiar a otras tres personas, un índice de reproducción bajo en comparación con otros como el sarampión que está entre 12 y 15.

"Ese umbral lo que dice es que con el 70% de la población vacunada la R0 estaría siempre por debajo de 1 y la Covid desaparecería, no que no vayamos a tener brotes", expresa el epidemiólogo. El por qué es que le costaría encontrar a quién contagiar y una persona contagiaría a menos de otra en promedio.

El catedrático de Inmunoparasitología de la Universitat de València, Rafael Toledo, va en la misma línea. "El 30 % que no está inmunizado está mezclado entre el 70 % que sí que lo está y como estos es más difícil que transmitan el virus, los no inmunizados quedan envueltos entre estos porque para que se contagien deberían estar en contacto con un no inmunizado que tuviera el virus en ese momento y pudiera contagiarlo", desgrana.

Peiró especifica que, además, la fórmula de la inmunidad de rebaño "asume eficacia vacunal del 100 %", un porcentaje que no alcanzan las vacunas aunque sí que tienen unos números de efectividad importantes, superiores al 85 % a la hora de frenar la transmisión y evitar el contagio. A menos efectividad, más personas sería necesario vacunar y tener inmunizadas para generar esa inmunidad de rebaño.

A esta se le añaden dos factores más. Primero, que el 70 % se considera en una población cerrada o que cuenta con un mismo porcentaje de vacunación a nivel global, algo que difícilmente ocurrirá en los próximos meses puesto que quedarán países con menos recursos que todavía estarán empezando su proceso de inmunización. A esto se le suman los reservorios animales, como gatos y hurones, un elemento que dificulta todavía más su control.

"El virus seguirá circulando, lo hará de forma muy diferente, requiriendo mucho trabajo y algunas medidas en los lugares de más propagación como los interiores mal ventilados y concurridos", sentencia Peiró. "Cuando se hayan vacunado al 70 % de la población, o incluso mucho antes con un 50 %, el virus seguirá circulando, pero lo hará en sectores de la población donde no se sufren las consecuencias de la enfermedad", expresa Toledo.