En las últimas horas, el perfil de la delegación territorial de la AEMET en la Comunidad Valenciana ha subido a las redes sociales unas imágenes y gráficos muy interesantes respecto a la oscuridad en la que estamos inmersos en este mes de abril en buena parte de la vertiente mediterránea. Mucha gente me lo ha comentado en las últimas semanas, en las que estamos teniendo un tiempo norteño, con abundante nubosidad, fresco y muchos días de lluvia (han caído algunos récords para el mes de abril). Efectivamente, la gente no está equivocada, y en una región como la Mediterránea enseguida se echa en falta nuestra luz, que es tan admirada por propios y extraños. La persistencia del viento de levante, la inestabilidad y la abundante nubosidad están siendo los responsables de esta (por ahora) no primavera. De hecho, en el conjunto de la Comunitat Valenciana hizo más calor a finales de enero que en los meses de marzo y abril. También resulta muy curioso que en el litoral gallego y en el cantábrico hayan tenido más horas de sol que en Benidorm, e incluso en muchas zonas del suroeste de Europa han disfrutado más del astro rey. En definitiva, está siendo uno de los abriles menos soleados desde que se tienen registros. Aunque esto a la gente le trastorna, es una buena noticia para el monte y los acuíferos, ya que la nubosidad y la ausencia de los ponientes favorecen que la humedad aguante mucho en el suelo, ya que casi cada día vamos sumando algo, aunque sea poco. Mayo parece que arrancará igual, aunque parece que conforme vayan pasando los días la situación meteorológica se irá normalizando, aunque desde luego no se puede descartar nada en este año, que ha empezado muy animado en lo que respecta a la meteorología.