Están en hospitales, clínicas privadas o universitarias y demás instalaciones sanitarias, pero siguen sin estar vacunados. Hacen labor de odontología, medicina o enfermería y aunque atiendan pacientes todavía con la ayuda de personas más formadas, profesionales que sirven de guía y enseñanza, están en primera fila.

La mitad del alumnado que realiza prácticas en el ámbito sanitario no están vacunados. Son unos 1.400 de los 2.900 que tiene la Universitat de València en carreras como Odontología, Medicina, Enfermería o Fisioterapia. Son aquellos que están en cursos intermedios y que ven cómo sus compañeros de último curso sí que han conseguido la inmunización para poder realizar su pasantía de forma segura.

El por qué es la coincidencia de dos situaciones independientes que para cerca de 1.500 jóvenes se ha convertido en un "qué mala suerte" que seguramente no afecte a su salud (el riesgo de covid grave en jóvenes es mínimo), pero que supone un riesgo añadido a la hora de infectar a familiares y amigos simplemente por ejercer una parte de su formación.

Por una parte, las prácticas universitarias en instalaciones sanitarias, debido a la alta incidencia del virus y la presión asistencial, quedaron limitadas exclusivamente a los últimos cursos de cada carrera donde esta parte adquiere un importante valor. Así, en Medicina, a los hospitales solo pudo ir el alumnado de sexto de Medicina o cuarto de Enfermería mientras que a las clínicas privadas o universitarias de salud dental solo iban los de quinto de Odontología.

Entre febrero y marzo muchos de este estudiantado de último curso fue vacunado. Lo hizo con la vacuna de AstraZeneca que estaba dirigida, en un principio, a los menores de 55 años y al grupo de segunda línea hospitalaria y personal sociosanitario entre los que estaban fisioterapeutas y odontólogos. Hasta ahí, sin problemas. De hecho, durante el mes de marzo también fueron vacunados aquellas personas de la rama educativa que hacía prácticas en los centros.

Sin embargo, a partir de marzo comenzaron los inconvenientes con AstraZeneca con una primera paralización y su posterior suspensión desde abril para los menores de 60 años. En esas fechas fue cuando se comenzaron a incorporar, gracias al descenso de la curva epidemiológica y los ingresos hospitalarios, el alumnado de cursos intermedios de manera progresiva.

Es esta entrada tardía, cuando AstraZeneca solo está autorizada para el grupo de 60 a 69 años mientras Pfizer, Janssen y Moderna está siendo destinada a mayores de 70 años y personas con condiciones de riesgo de covid grave, la que deja, de momento, a 1.500 estudiantes sanitarios en primera línea sin vacunar.

 En abril también se incorporaron a las prácticas 120 alumnos de 5º de Medicina en el caso de la Universidad Católica de Valencia, y más de un centenar del mismo curso y carrera de la Universidad CEU Cardenal Herrera.

Queja de la rectora

En un mensaje que este semana la rectora de la UV Mavi Mestre hizo llegar a la comunidad universitaria, anunció que ha pedido, tanto al Ministerio de Universidades, como al Ministerio de Sanidad y las consellerias competentes, que se inmunize a todos los estudiantes de la rama de Ciencias de la Salud que realizan prácticas en el Sistema Sanitario Público o en clínicas privadas, así como en instalaciones propias de la universidad, con pacientes reales.

“Nos preocupa, como sé que os preocupa a vosotros”, dijo dirigiéndose a los estudiantes. Asimismo, Mestre aprovechó para volver a reclamar que el Personal Docente e Investigador (PDI) y el de Administración y Servicios (PAS) sea incluido en la estrategia de vacunación, una petición que han hecho tanto las universidades a nivel estatal (desde CRUE), como el sistema universitario público valenciano, como la propia UV.