Desde hoy se podrá entrar y salir libremente de la Comunitat Valenciana, se podrá estar en la calle más allá de las 22 horas hasta la medianoche y, casi como por caída lógica de dominó, bares y restaurantes podrán retrasar su cierre hasta las 23:30 horas. Hasta ahí era básicamente lo conocido a lo largo de la semana, la brocha gorda y que no ha causado sorpresa que lo sacara adelante la Mesa Interdepartamental. Esas mismas cuestiones y por esos mismos términos habían preguntado al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana que había dado su visto bueno.

Ahora, la letra pequeña. En una edición extraordinaria del Diari Oficial de la Generalitat, casi a la par con lo excepcional de la situación y la caída de un estado de alarma en la madrugada del sábado a un domingo, llegaban los otros cambios, los de pluma estilográfica. En realidad, supone el detalle de lo que será la vida desde hoy hasta el próximo 24 de mayo cuando se revisen porque, indicaron desde el Consell, se trató de una ‘limpia’, cayendo y siendo sustituidas «todas las medidas existentes y arrastradas».

Más allá del tecnicismo, todo continúa prácticamente igual, salvo alguna cosa que decía aquel. El principal cambio es el aumento del máximo de personas por grupos reunidas en espacios públicos. De seis se pasa a diez, máximo que sirve también para las mesas de bares y restaurantes y que tiene una salvedad en las viviendas particulares: como máximo dos núcleos de convivencia.

Los mayores cambios se dan en los aforos. Aumenta del 30 al 50 % el de los interiores de la hostelería, llega hasta el 75 % en las sedes festeras para actos administrativos, un porcentaje que se repite también para las zonas comunes de los hoteles y alojamientos turísticos. Se mantiene, no obstante, en el 75 % el aforo de locales comerciales, lugares de culto y espacios culturales como cines, teatros o auditorios.

Tampoco ha surtido efecto la presión de la industria musical para incrementar el aforo de los conciertos al aire libre. Las nuevas medidas frente a la covid-19 que empezarán a funcionar a partir de esta media noche mantiene el límite de mil personas o de 2.000 divididas en sector de 500 sillas cada uno.

Sí que sufre modificaciones la cantidad de personas que pueden acudir a una competición deportiva no profesional ya que la profesional tiene otra regulación. En instalaciones al aire libre se puede llegar hasta los 4.000 si se divide en cuatro sectores de 1.000 (sino será de 2.000) mientras que en espacios cerrados el máximo será de 1.000 o de 3.000 dividido en tres sectores de 1.000.