La desescalada en la Comunitat Valenciana tiene su reflejo en las listas de espera. El vaciamiento de las UCI de pacientes covid cuenta con su vaso comunicante en el aumento de las intervenciones quirúrgicas que hasta el mes de marzo estuvieron prácticamente paradas. Así, la demora para este tipo de operaciones vivió en abril su segundo mayor descenso en un mes de pandemia y recupera los niveles previos a la tercera ola.
Según los datos publicados ayer por la Conselleria de Sanidad, una persona que quisiera operarse en la Comunitat Valenciana tendría una espera media de 127 días. Son 15 días menos que en el mes de marzo (142), dos más que en diciembre cuando los quirófanos tuvieron que frenar su actividad ante el crecimiento de ingresos, pero todavía lejos de los 80 que se alcanzaron en febrero de 2020, antes de la pandemia.
No obstante, es un mes de espera menos que en los peores momentos de este aspecto, en agosto, cuando se conjugó la salida de la primera ola y las vacaciones de verano donde habitualmente crecen estas cifras. Prácticamente se sitúa en los mismos niveles de hace un año aunque la tendencia es bien distinta.
Este descenso viene provocado por un incremento de las intervenciones quirúrgicas en el mes de abril, hasta las 11.642 que, tal y como señaló la secretaria autonómica de Eficiencia y Tecnología Sanitaria, Concha Andrés, supone un aumento del 9 % respecto a las realizadas en marzo. «Una vez hemos podido recuperar progresivamente la actividad quirúrgica, hemos sido capaces de atender no solo lo urgente y no demorable sino ir incrementando a buen ritmo las operaciones a pacientes en lista de espera», expresó Andrés.
Desde Sanidad recordaron que el 8 de enero cesó la actividad quirúrgica para pacientes en lista de espera. En ese momento, eran 65.400 los pacientes pendientes de ser intervenidos y 142 los días de demora. El 17 de marzo empezó a recuperarse la actividad en los quirófanos hasta llegar a final de abril con 127 días de demora y un total de 61.387 pacientes en lista de espera.
Estos 61.387 pacientes son 1.300 menos que los que había el mes anterior, pese a la incorporación de 30.000 pacientes nuevos. De hecho, respecto al mes anterior destaca el cambio de distribución. Así, hay un incremento de 5.000 pacientes con menos de tres meses de espera mientras que aquellos que cuentan con una demora de más de 90 días caen un 16 %, de 38.413 de marzo a los 32.234 del mes de abril.
Sin embargo, resulta también reseñable que casi un tercio de quienes esperan una intervención lleven más de seis meses de demora.
Diferencia por departamentos
Entre los departamentos de salud, el que mayor demora estructural tiene es el Hospital General de València (193 días) —uno de los más afectados por la tercera ola y que esta semana celebró que daba de alta a su último paciente covid en UCI—, seguido del Provincial de Castelló (177 días), que es el único que ha crecido en el último mes con 10 días de espera más. y del departamento de salud de Sant Joan d’Alacant (164 días). En el lado opuesto, el departamento de Elx (46 días), Torrevieja (42) y el Doctor Peset (66) son los que menos demora tienen.
Por especialidades, la cirugía plástica (con 216 días), la torácica (197) y la neurocirugía (175) son las que más demora acumulan mientras que destacan los descensos de más de un mes (35 días) en la cirugía pediátrica, de 22 días en urología y de 41 días en dermatología. Así, esta especialidad es la que menos espera tiene (60) por los 75 días de la cirugía cardiovascular y los 82 de oftalmología.
También hay importantes diferencias entre las distintas patologías que son susceptibles de ser intervenidas quirúrgicamente. Por ejemplo, el tiempo de espera medio para una persona que quiere operarse de cataratas es de 71 días (que ha vivido un descenso de 20 días en un mes) por los 149 días que hay para ser intervenido para una prótesis de rodilla.
