Las denuncias por violencia de género siguen cayendo a pesar de todas las campañas institucionales para hacer aflorar el terrorismo machista y poder proteger a las mujeres. Así, en este primer trimestre de 2021, las denuncias se han reducido en un 8,5 % respecto del mismo periodo del año anterior, al pasar de 5.238 en 2020 a 4.794 en 2021.

Aunque el gran frenazo se produjo precisamente en el segundo trimestre del año pasado, como consecuencia directa del confinamiento de la población, lo que obligó a muchas mujeres a vivir encerradas con su maltratador y a no considerar la posibilidad de pedir ayuda por el aumento del control de los agresores al tener una convivencia ininterrumpida las 24 horas al día, el final de aquella situación, cuando ya ha pasado un año completo, no solo no se está normalizando, sino que tampoco crece.

De hecho, el año pasado ya se produjo un importante decremento (6,9 %) en la comparativa entre los primeros tres meses del año. Así, en el primer trimestre de 2019 se registraron 5.626 denuncias, y año después, en 2020, las 5.238 mencionadas. El punto de inflexión fue, según las estadísticas que recoge el Poder Judicial a través del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, precisamente ese 2020, sin que las personas especializadas en el análisis y prevención del terrorismo machista hayan encontrado aún una explicación clara a ese descenso de las denuncias.

El descenso no solo se ha producido en la C. Valenciana, sino que es generalizado en todas las comunidades autónomas. Las cifras estatales lo dejan claro: este año se han recogido 35.001 denuncias entre el 1 de enero y el 31 de marzo, cuando en el mismo periodo del año pasado hubo 36.162. El descenso, de un 3,2 %, es considerablemente inferior al de la C. Valenciana, pero sirve para constatar esa tendencia global a la baja.

Entre las autonomías con mayor bajada se encuentran Navarra, con más de un 18 %; Baleares y Cantabria, con algo más del 15 %; y La Rioja, con casi un 13. La siguiente, en quinta posición, ya es la valenciana, situación que empieza a preocupar porque, con el actual marco legal, la protección de las víctimas está supeditada a los procesos penales. En otras palabras, sin denuncia, no hay protección posible para la mujer y los menores que viven en el infierno del maltrato.

Las denuncias por violencia machista siguen cayendo pese a la desescalada

Pérdida de confianza

Aunque, como todo hecho delictivo y social la violencia machista es multifactorial, especialistas en la materia coinciden en señalar la actual situación de crisis económica e inseguridad laboral derivadas de la pandemia como uno de los motivos que más pueden estar influyendo en frenar a las mujeres en situación de maltrato a la hora de denunciar y activar la ayuda. Es, de nuevo, el miedo y, por ende, la pérdida de confianza.

En esa tendencia a la baja, también se han visto incluidas, lógicamente, la cifra global de víctimas —4.699 este año, frente a las 5.069 que había en 2020— y, por ende, la de las órdenes de protección.

Según los datos hechos públicos ayer por el Observatorio, en los tres primeros meses del año los juzgados valencianos de Violencia sobre la Mujer incoaron 1.138 órdenes y medidas de protección y seguridad, exactamente 7,3 % menos de las iniciadas en ese mismo lapso temporal en 2020.

Y algo preocupante, el porcentaje de las concedidas ha sido este año un 10,2 menor, lo que significa que no solo se han incoado menos, sino que, además, se han adoptado porcentualmente menos que el año pasado: en 2020 no prosperaron (por inadmitidas o denegadas) el 14,5 % de las órdenes iniciadas, mientras que este año los juzgados han frenado un 16,9 % de esas medidas de seguridad y protección.

Eso sí, el número de enjuiciados ha crecido esta trimestre un 8,5 %, de los cuales acabaron condenados un sutil 0,1 % más en que en 2020. Ese aumento de presentados ante los tribunales obedece, posiblemente, al acúmulo de expedientes judiciales provocado por el parón impuesto en el primer estado de alarma, y que ha obligado a los juzgados a acelerar su actividad durante un año en su intento por volver a ponerse al día. Lo refrenda el hecho de que no solo han crecido las condenas (un 8,6 %), sino también las absoluciones (10 %) y los sobreseimientos, tanto los libres (20.9 %) como los provisionales (17,5 %).

Un dato positivo: aunque ham aflorado menos víctimas y denuncias, las que han dado el paso lo han hecho más seguras, ya que el número de renuncias —cuando la víctima acaba no declarando contra el agresor— se ha reducido cas un 9 % en estos primeros meses de 2021.

Manifestación contra los feminicidios

La Coordinadora Feminista de València ha convocado una manifestación para el martes 22 de junio para «sacar a la calle el grito de ‘¡Basta ya!’» y «quemar» el patriarcado en protesta por los crímenes machistas de los últimos días, así como por las 41 mujeres asesinadas por violencia de género en 2021, al tiempo que pide que se decrete un «estado de alarma por feminicidios». La manifestación partirá a las 19.30 horas desde la plaza de la Porta de la Mar y recorrerá Colón, Xàtiva y Marqués de Sotelo, para finalizar en la plaza del Ayuntamiento, donde se leerá un manifiesto y se realizará una acción simbólica bajo el lema ‘Els masclistes ens maten, cremem el patriarcat’.

Minutos de silencio por Anna y Olivia

Las corporaciones de varios ayuntamientos valencianos s e concentraron ayer para expresar su condena y rechazo a la «barbarie machista» de los «terribles» últimos casos de violencia de género registrados en el país, guardando minutos de silencio. A la protesta «silenciosa» convocada por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para condenar el asesinato de las niñas Anna y Olivia, en Tenerife, así como los de seis mujeres, una de ellas embarazada, y otro niño durante el último mes, se sumaron, entre otros, València, Quart de Poblet, Bétera, Llíria, Xirivella, Alboraia, Rafelbunyol o Paterna.


El teléfono contra el maltrato es el 016, atiende las 24 horas del día en múltiples idiomas y no deja rastro en la factura.