Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los expertos temen una temporada de incendios más larga y peligrosa

Las comarcas del Alto Mijares y La Serranía son las más expuestas al fuego

Bomberos en el incendio del área recreativa Pi d’Ambrosio en l’Énova en agosto de 2020. | PERALES IBORRA 

El verano es una puerta abierta para que miles de familias se lancen a conocer los montes, montañas y parajes naturales de la Comunitat Valenciana. Pero también es la estación más temida por el peligro de incendios. Para aquellos municipios que cuentan con masa forestal es todo un reto afrontar la temporada estival, siempre en alerta y con los medios más que justos para afrontar un posible fuego.

De los 542 municipios de la Comunitat Valenciana, 525 poseen, en mayor o menor medida, terrenos forestales. Según la Asociación de Municipios Forestales de la Comunitat Valenciana (Amufor), que reúne a 75 de las localidades con más recursos verdes, «la falta de una gestión forestal sostenible y de actuaciones por parte de la Administración» son las principales problemas a los que se enfrentan sus montes.

Pese al importante dispositivo para combatir los incendios que cada año prepara la Generalitat (este año son 432 personas las que se dedican a las labores de extinción, entre medios terrestres y aéreos), consideran que el monte sigue descuidado y poco preparado para evitar los fuegos.

Análisis que aún empeora la Plataforma Forestal Valenciana, que no duda en calificar de «dramática» la situación de los montes de nuestro territorio y pone en alerta a dos comarcas. «Sobre todo tiene un gran peligro de sufrir un incendio el Alto Mijares, además de La Serranía», asegura Rafael Delgado, responsable de la entidad y profesor de Incendios Forestales de la Universitat Politècnica de València.

Más medios

La presidenta de Amufor (Asociación de Municipios Forestales), Consuelo Alfonso, reclamaba hace unos días en este periódico «la necesidad de que la sociedad se empodere para tomar parte en los problemas existentes en el medioambiente, los cuales repercuten en la gestión forestal, siendo el canal más directo para ello las administraciones locales más próximas al ciudadano». Y es que los municipios forestales exigen más medios, recursos y, sobre todo y en referencia a la Generalitat, más gestión forestal.

Los ingenieros de Montes señalaban, también en las mismas páginas de Levante-EMV, que talar árboles está «muy mal visto» por la sociedad, que olvida el resto de importantes elementos que forman parte de la gestión forestal sostenible.

«Es una gestión con muchas transversalidades», asegura Rafael Delgado, «desde convertirse en una herramienta contra el cambio climático, a ser una aliada contra los problemas de despoblación, la falta ocupación en estas localidades con la generación de biomasa, y poner en marcha una economía circular y proximidad, algo que poca gente acaba practicando», lamenta.

Delgado, portavoz de la Plataforma Forestal Valenciana, señala que desde el punto de vista climático esta primavera ha llovido bastante «y ha aparecido mucho combustible», en referencia a la crecido del monte bajo y matorral. Además, y debido al cambio climático «las temperaturas cada vez son más elevadas y también el verano se está alargando, comenzando en junio y llegando a septiembre», por lo que aumenta el temor de que se produzcan más incendios. «La temporada de máximo riesgo llega a septiembre y octubre en estos momentos», advierte el también profesor de la UPV.

El experto de gestión forestal asegura que la Comunitat Valenciana llega al verano «con los deberes por hacer, sin ir a clase y con losexámenes puestos». «Si hay suerte aprobarás», ironiza Rafael Delgado. El profesor de la Politècnica lamenta que la gestión forestal «se continúa abordando como un problema de manera ideológico y no técnico», y cree que es un «grave error» del gobierno tripartito de la Generalitat.

Delgado es rotundo: «Estamos peor en gestión forestal que hace unos años. Cada vez crecen más los montes, por el abandono agrícola, por la despoblación..., es una cuestión casi antinatura, porque tenemos más superficie de bosque que nunca en la historia. La situación es catastrófica». Pero el responsable de la Plataforma Forestal va más lejos y vaticina que no tardará en llegar «un incendio brutal de 500.000 hectáreas». «No quiero que pase, quiero equivocarme, pero el peligro es enorme», reconoce.

Compartir el artículo

stats