La Ley de Protección, Bienestar y Tenencia Responsable de los Animales de Compañía contempla multas desde 100 a 45.000 euros para los maltratadores. Además, prevé la creación de un registro de personas y entidades inhabilitadas judicialmente por infringir daños a mascotas. La Generalitat busca así evitar que puedan volver a gestionar por ejemplo núcleos zoológicos.

El endurecimiento de los castigos ayudará a que los ayuntamientos no se vean desamparados, porque antes solo se multaban situaciones muy extremas. Las sanciones graves comportarán la incautación o confiscación de los animales. Los ingresos procedentes de las penas se destinarán a actuaciones que tengan por objeto la protección de los animales, según el documento.

El nuevo marco legislativo, que ahora iniciará su tramite parlamentario en las Corts, coincide con el planteamiento del Gobierno central de impedir que se puedan mantener malas prácticas con los animales con el traslado de una autonomía a otra, como venía ocurriendo con más frecuencia de lo deseable.

No a la exhibición de mascotas

El texto recoge también la prohibición de exhibir mascotas en escaparates comerciales para la venta, o el establecimiento de una tasa municipal - flexible y proporcional- por la tenencia o cría de gatos y perros como algunos de los pilares sobre los que pivota la futura Ley de Protección de Animales de Compañía de la Comunitat Valenciana. El proyecto, que fue aprobado ayer por el Pleno del Consell, establece además el «sacrificio cero», la erradicación del abandono y el fomento de la adopción.

Como prohibición expresa figuran el sacrificio sin eutanasia, el maltrato y hacer donación de animales como premio, reclamo publicitario, recompensa o regalo de compensación por otras adquisiciones de naturaleza distinta a la transacción onerosa, como ya adelantó Levante-EMV hace unos meses.

Actividades crueles no

Tampoco se permite la utilización en espectáculos, peleas, fiestas populares y otras actividades que impliquen crueldad, maltrato o puedan ocasionar lesiones o incluso la muerte del animal. Tampoco podrán tirar de carruseles, práctica que aún podía contemplarse en ferias.

Las entidades locales dispondrán de un año para desarrollar o adaptar sus ordenanzas a la normativa autonómica, una vez entre en vigor esta propuesta de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica.

El texto normativo es pionero a nivel estatal al impedir que se siga tratando como objetos a los animales de compañía. Se les reconoce como lo que son, seres sensibles, por lo que se regulan las condiciones de vida digna que se les han de garantizar. Tanto en su atención y cuidados, como la alimentación o incluso un control de las camadas en aquellas hembras que se utilizan para la cría.

Campañas municipales a favor de la adopción y contra el abandono

Los ayuntamientos tendrán que realizar campañas periódicas, al menos anuales, de promoción de la esterilización como medida preventiva contra el abandono, así como el fomento de la adopción. Podrán contar con ayudas o subvenciones de las diputaciones y la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica. La ley brinda amparo legal a prácticas dentro del ámbito municipal como la creación de fórmulas públicas de adopción.