La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 42 años y nacionalidad rusa acusado de una docena de robos con fuerza en casas habitadas de València cometidos desde 2018. Se le ha podido relacionar con todos estos hechos delictivos precisamente por los marcadores de plástico que el delincuente dejaba en las puertas de las viviendas para saber si los propietarios han entrado o salido de sus domicilios. En esta ocasión el ‘chivato’ que emplean los ladrones se le ha vuelto en su contra y ha sido la herramienta empleada por la policía para lograr identificarlo mediante el ADN que había dejado con su saliva, al colocar este sencillo mecanismo de plástico transparente en el marco de las puertas de la finca donde posteriormente entró a robar.
Su detención se produjo el pasado domingo 1 de agosto cuando la Policía Nacional recibió un aviso de que tres ciudadanos, al parecer de países del Europa del Este, estaban intentando forzar una vivienda en la calle Poeta Ricardo San Martín de València.
Cuando los agentes se desplazaron al lugar sorprendieron a tres hombres de nacionalidad georgiana que presuntamente estaban colocando pequeñas pestañas de plástico en las puertas con la intención de marcar posibles objetivos para posteriores robos una vez comprobaran la baja actividad de los moradores.
La documentación que portaba uno de ellos resultó ser falsa y realmente se trataba de un delincuente ruso con reclamaciones de varios juzgados de València por otros robos en los que habría utilizado esta misma práctica delictiva, como así acreditaban los informes de ADN de la policía científica. El Juzgado de Instrucción número 20 de València, en funciones de guardia, acordó su ingreso en prisión provisional, por más de una decena de robos, y se inhibirá al resto de juzgados competentes.
