El incremento de la temperatura del planeta es ya en muchos puntos del Mediterráneo sinónimo de fenómenos meteorológicos extremos. Para hacer frente a lluvias cada vez más torrenciales, olas de calor o sequías, voces expertas como la de Samira Khodayar abogan por cambiar el diseño de las ciudades. La investigadora del Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM) pone como ejemplo los drenajes sostenibles o el aumento de las zonas ajardinadas, donde está comprobado el descenso de los termómetros. La regeneración urbana es uno de los aspectos que recoge la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica.

Las administraciones públicas valencianas deberán promover el reverdecimiento de los municipios para fomentar el secuestro de carbono y minimizar el efecto isla de calor. La construcción de los espacios municipales tendrá que llevarse a cabo «desde un punto de vista ecosistémico teniendo en cuenta aspectos como la permeabilidad del suelo, drenajes sostenibles, orientaciones o adaptación climática entre otros».

Medidas más rápidas

En ese sentido, Khodayar alertaba de que las medidas de mitigación y adaptación han de darse conjuntamente. «Algunas ciudades ya están apostando por estas soluciones verdes, o por una movilidad más sostenible, que son muy importantes pero no se están aplicando todo lo rápido que requiere la situación», argumenta.

En la misma línea se expresaba la secretaria autonómica de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Paula Tuzón, que ayer incidía en «renaturalizar los entornos urbanos». «No hay nada más eficiente de momento que la fotosíntesis para capturar CO2. Nada que nos haga más fuertes»», señalaba en su cuenta en las redes sociales.

El texto, al que el pleno del Consell dió luz verde el pasado viernes, hace hincapié en la limitación de la mancha urbana y de la artificialización del suelo. Como alternativa propone el desarrollo de modelos de ocupación del territorio menos agresivos con los recursos naturales, que minimicen los desplazamientos y que cuenten con una red eficaz de transporte público. Una planificación urbanística «valiente y decidida» como recalcaba la consellera Mireia Mollà en su comparecencia pública.