Parajes naturales blindados contra el fuego. La Generalitat tomó ayer, por primera vez, la decisión de limitar el acceso a doce parques naturales ante la ola de calor extremo que entre hoy y mañana alcanzará de pleno a la Comunitat Valenciana. Las restricciones más severas, donde se cerrarán las pistas forestales, se aplicarán en la Serra d’Irta, Desert de Les Palmes, Penyagolosa, Tinença de Benifassà, Espadà, Calderona, Puebla de San Miguel, Túria, Hoces del Cabriel, Mariola, Font Roja y Prat de Cabanes. «No es un buen momento para ir al bosque», lanzaba Ximo Puig con tono preocupado.

Mollà, Bravo, Grimalt, Calero y Puig, ayer, antes de reunirse en el Ayuntamiento de Dénia.

En el resto de parajes con alto valor ecológico tampoco se podrá practicar senderismo, hacer barbacoas o acampar. La medida, tomada de forma coordinada por la Conselleria de Emergencia Climática y Transición Ecológica junto con la de Justicia, Interior y Administración Pública, persigue minimizar riesgos. El president de la Generalitat era muy claro en su comparecencia pública de ayer en Dénia: «El objetivo es evitar lo que está sucediendo en Grecia y en Turquía».

Además, se realizaran vuelos de humidificación y se reforzarán en un cincuenta por ciento los de vigilancia preventiva en todo el territorio. «Estamos ante una situación excepcional», insistía Puig, quien defendía : «Hay que pensar en la seguridad sanitaria de las personas y también en que se pueden ver atrapadas en un fuego». «Desde el viernes al lunes se va a vivir un momento de máxima tensión y nuestras zonas forestales deben estar lo más húmedas posibles», incidía. «Ojalá la ola de calor sea menos dura de lo que se anuncia, pero prevenir es fundamental». El president no dejaba pasar la ocasión para pedir «responsabilidad» a los ciudadanos.

Albergues sin excursiones

Desde este jueves, cuando se publique la resolución en el Diari Oficial, quedará vetada toda actividad que comporte la posibilidad de un desastre natural. Aquellas personas que estén estos días en albergues podrán permanecer en ellos, pero sin realizar excursiones o paseos. Las limitaciones incluyen también a chalés o urbanizaciones situadas en la interfaz agrícola, donde deberán suspenderse todo tipo de actuaciones que impliquen el uso del fuego o provoquen chispas.

Puig explicó que esta batería de disposiciones irá acompañada de un incremento de recursos, para lo que se ha contactado con los tres consorcios.

El Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat establecerá el nivel 3 de preemergencia. El articulo 59.4 de la ley valenciana de montes autoriza al Consell a impedir la entrada en las zonas forestales cuando concurren circunstancias peligrosas para la flora y fauna, como elevadas temperaturas o fuertes vientos de poniente.

Con el incendio aún reciente de Rafelguaraf el pasado fin de semana, que calcinó unas 180 hectáreas de masa vegetal y en menor medida arbórea, el gobierno valenciano quiere evitar que se repitan este tipo de sucesos.

Especialmente con los graves incendios que están asolando Turquía y Grecia, con imágenes dantescas. En todo caso, en la Comunitat Valenciana ya estaban suspendidas las quemas agrícolas desde el mes de junio hasta el próximo 16 de octubre.

Como en Cataluña

La determinación del Botànic ya la había tomado un día antes el Govern catalán al cerrar las entradas a cinco parajes naturales de la Cataluña central, Tarragona y el Prepirineo, el parque natural de la Muntanya de Montserrat, el de la Serra de Montsant, el Espai Natural Protegit del Montmell-Marmellar, el Montsec y la Baronia de Rialb. También suspendía el gobierno de Pere Aragonés las actividades tanto agrarias como forestales que puedan desencadenar un fuego en 279 municipios de 24 comarcas.

En la Comunitat Valenciana, el 55,2 % de los terrenos forestales pertenecen a particulares, el 38,6 % son de propiedad pública. Se reparte fundamentalmente entre los ayuntamientos, que poseen tres cuartas partes (76 %), quedando una menor proporción en manos de la Generalitat (15,4 %) y otros entes locales (8,5 %).

Los daños de Gloria y Filomena

Los montes valencianos siguen cargados de combustible pese a las tareas de prevención y selvicultura, especialmente en el interior de Castelló, donde el temporal Gloria primero y la tempestad de nieve Filomena después, dejaron serios daños en los árboles de mayor envergadura, situación que ha suscitado críticas por parte del Partido Popular.

En lo que va de 2021, el Servicio de Prevención de Incendios Forestales lleva registrados 107 incendios con 75,44 hectáreas, a los que hay que sumar el de Rafelguaraf. Los rayos, las negligencias y las acciones intencionadas son las principales causas.