El exalcalde de Enguera Santiago Arévalo también se escudó ayer en los técnicos municipales para justificar la adjudicación a una de las empresas investigadas en el caso Taula, Servimun SL, de un contrato. Arévalo declaró ayer como investigado ante la juez sustituta del Juzgado de Instrucción 18 de València y el Fiscal Anticorrupción del caso Taula por adjudicar a Servimun un contrato en el que la Agencia Valenciana Antifraude detectó irregularidades. El exregidor de Enguera admitió conocer al empresario Mariano López, que ejercía de representante de Servimun. Y defendió que en el procedimiento negociado para la adjudicación de uno de los contratos buscaron en internet a las otras dos empresas que participaron. Un extremo desmentido por la funcionaria que declaró tras él, quien confirmó que los nombres de las empresas que participaron en el procedimiento negociado se dieron «desde alcaldía».
El empresario Mariano López y una familiar también comparecieron ayer por estos hechos, aunque ambos se acogieron a su derecho a no declarar.
Por último, el actual alcalde de Requena, Mario Sánchez, no identificó a López como representante de Servimun, como ayer informó por error este periódico. Sánchez, que aprobó la prórroga del contrato de Servimun con Requena, únicamente conocía al titular de la empresa Fernando Palomares, también investigado en esta causa.
