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Las ampa piden más medios ante la posible supresión de las recuperaciones de ESO

Los equipos directivos ven necesario revisar el sistema para evitar el alto número de repeticiones: «no es que todos aprueben, es que no abandonen»

Estudiantes durante las PAU del junio pasado. | GERMÁN CABALLERO

El Ministerio de Educación plantea suprimir los exámenes de recuperación en Secundaria. Así consta en el proyecto de real decreto que regulará la promoción de Primaria, Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional. Según el texto que propone el ministerio, la evaluación en la ESO será «continua, formativa e integradora» y en este nivel ya no será necesario realizar una prueba extraordinaria o examen de recuperación de las materias no superadas; sí en Bachillerato.

Así, en este nuevo escenario que plantea el Gobierno con la Lomloe, los estudiantes de ESO promocionarán cuando el profesorado considere que las asignaturas no superadas no les impiden seguir con éxito el curso siguiente. Por lo tanto, la permanencia en el mismo curso será una medida «excepcional».

Esto ya figura en la ley actual y es así en la teoría. No obstante, en la práctica, el sistema educativo valenciano —igual que todo el español en su conjunto— abusan en exceso de las repeticiones, con una tasa más elevada que la media europea. Como publicó este periódico en 2018, la tasa de repetición en la Comunitat Valenciana llegó a ser del 35 % del total del alumnado de 15 años, porcentaje que multiplicaba por tres la media de la Unión Europea (11 %) y estaba cuatro puntos por encima del promedio español (31 %).

Por eso la Conselleria de Educación ya se había propuesto trabajar para reducir estos datos y se ha intentado que la pandemia no dispare el número de repetidores.

Preguntados sobre la nueva propuesta de Educación —que todavía es un borrador y ahora tienen que trabajar las comunidades autónomas—, tanto las ampa como los equipos directivos valencianos coinciden en que es necesario actuar, si bien se muestran cautos antes de leer la redacción definitiva de la propuesta y qué medios se facilitarán.

«El sistema debe aportar más»

Rubén Pacheco, presidente de la Confederación de Ampa Gonzalo Anaya, explica que se debe «analizar la letra pequeña» y que si la repetición se elimina en muchos casos, «habrá que ver cómo se compensa» y cómo «se reequilibra para que todos los alumnos tengan las máximas posibilidades para poder desarrollarse por completo».

«No es negativo per se que el profesorado decida, pero tanto los alumnos que pasen de curso con carencias como los que no, necesitarán los refuerzos suficientes para superarlas, estén en el curso en el que estén», explica Pacheco. «El estudiante debe esforzarse, pero el sistema tiene que poner más, y ahí es donde falla», lamentan las ampa.

Por su parte, Toni González Picornell, presidente de la Associació de Directors d’IES (Adies), reconoce que la cuestión de la repetición está sobre la mesa y «hay casos en los que no es buena». Eso sí, considera que si se eliminan totalmente las pruebas extraordinarias —que antes eran en septiembre y ahora a finales de junio y julio—, se harán otras similares pero a nivel de clase, no generales y antes de fin de curso.

Asimismo, detalla que la tasa de aprobados en las recuperaciones suele ser muy baja, menos del 3% del alumnado que se presenta, por lo que no son una solución. «No es que todos aprueben, es que no abandonen sus estudios», aclara el docente sobre el debate que se ha abierto entre la comunidad educativa.

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