Más de medio millar de personas sin hogar fueron alojadas en centros de acogida durante el año 2020 en la C. Valenciana. De los 547 sin techo, tres de cada cuatro eran hombres, solo un 24 por ciento mujeres, y la ocupación de los centros estuvo, de media, al 77 %, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La estadística, que se publica cada dos años, refleja una bajada importante respecto a los datos de 2018. Entonces fueron acogidas 705 personas, un 23 por ciento más. La ocupación también fue más alta, del 87 % de media. Respecto a las mujeres acogidas, el porcentaje no varió. Pasaron de 159 de media en 2018 a 147 durante el año de la pandemia. El descenso en las cifras se produjo especialmente en el caso de los hombres.
Las principales causas de llegada a estos centros de acogida, según los datos del INE, fueron por inmigración o solicitud de asilo, con el 22 %, trastorno mental (11 por ciento) y adicción a las drogas o al alcohol (7,4 por ciento cada una). Con un 3,4 % cada uno, personas con VIH y excarceladas.
Disminución por cuarto año
Se trata del cuarto año consecutivo de bajada de las cifras, ya que en 2016 los centros de acogida de la Comunitat Valenciana alojaron a una media de 927 personas sin hogar. En 2014 fueron 672 personas. El momento álgido en esta década se registró en el año 2010, en pleno agujero de la crisis financiera, con 1.025 personas de media en los centros de acogida.
Si ampliamos el foco en el año 2020, la Comunitat se sitúa a la cola de España en cuanto a plazas ocupadas por personas sin hogar en centros de acogida. País Vasco lidera la tabla multiplicando por ocho la cifra valenciana. Más de 3.800 personas alojadas en centros de acogida de media.
Lejos se sitúan autonomías con mucha población como Madrid (2.100 de media), Andalucía (1.900) y Cataluña (1.900). Mención aparte merece la ciudad autónoma de Melilla, que alojó a 1.630 personas de media el año de la pandemia. El triple que toda la Comunitat Valenciana.
