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Clara Campoamor se quedó sin el apoyo de sus ‘socios’ valencianos

Solo ocho de los 37 diputados de la delegación votaron en 1931 en el Congreso a favor del voto femenino, 17 se abstuvieron y 12 lo rechazaron, algunos pese a ser del grupo de la sufragista

Imagen de archivo de Victoria Kent y Clara Campoamor, protagonistas del debate. | LEVANTE-EMV

Tras un arduo debate protagonizado por dos mujeres, llega el momento de votar. El presidente del Congreso llama al orden y entre el murmullo, empieza a enumerar uno a uno a todos los parlamentarios presentes que deben decir si están de acuerdo o no en cambiar el artículo 34, el que permitirá que el sufragio sea verdaderamente universal en España. Si se aprueba, ellas, la mitad de la población, tendrán el derecho al voto igual que ellos. Es octubre de 1931 y han pasado 90 años.

Los 161 diputados que se manifiestan a favor de que las mujeres puedan votar supera los 121 que lo rechazan. El derecho se promulga, hay vítores por una parte y ruido por la otra. Sin embargo, quien ha recabado más votos es el silencio de la abstención. La delegación valenciana con 31 diputados de hasta seis partidos distintos es el ejemplo claro de que la mayoría ha decidido no posicionarse en un debate que, como recuerda el catedrático en Periodismo, Francesc Martínez Gallego, «era mucho más complejo de lo que parece».

Según el Diario de Sesiones Número 48 del Congreso de los Diputados que recogió aquella votación, de los 37 parlamentarios valencianos solo votaron 20 de los que 12 lo hicieron en contra y 8 a favor. Esto es: si hubiera sido por los representantes de la Comunitat Valenciana las mujeres hubieran tenido que esperar para ejercer su derecho a voto.

El resultado llama especialmente la atención puesto que más de la mitad de los diputados elegidos formaban parte del mismo grupo parlamentario (el Radical) que la gran defensora del voto femenino durante el debate y que pasará por ello a la historia: Clara Campoamor. «El arco parlamentario republicano es muy complicado y variado y en el Grupo Radical hay de todo», explica Martínez quien añade que en ese momento «hay mucha libertad de voto, era muy frecuente romper los bloques de partido».

En el caso valenciano, destaca el PURA, Partido de Unión Republicana Autonomista, de raíces blasquistas con Sigfrido Blasco Ibáñez (hijo del escritor) como líder. Él es precisamente uno de los que no se pronuncia ni a favor ni en contra tras el debate. «El PURA tenía muchos elementos patriarcales, pero eran demócratas y republicanos, y encima tenían a su compañera Clara Campoamor defendiendo el sufragio femenino por lo que es probable que la mayoría se fuera porque no sabían qué hacer», insiste el experto en historia de la Comunitat Valenciana.

De la delegación valenciana la mayoría de compañeros parlamentarios de Clara Campoamor o se van del hemiciclo en el momento de votar o votan en contra de lo que la diputada defiende. A favor, vota el único representante de la Derecha Liberal Republicana (Sales Musoles) y los siete diputados del PSOE, un partido en el que también hay quienes votan contra el sufragio femenino y que nueve décadas después se sigue reproduciendo el mito de que toda la formación votó en bloque contra el derecho de las mujeres.

En el trasfondo, Martínez hace una precisión: la mayoría de quienes votan en contra del sufragio femenino, incluida Victoria Kent que hace la defensa desde la tribuna, no lo hacen porque las mujeres no tengan derecho a votar, «sino si han de votar ya». «Creo que no es el momento de otorgar el voto a la mujer española, lo dice una mujer que, en el momento de decirlo, renuncia a un ideal», son palabras que usa en ese momento Kent, según el diario de sesiones.

¿Era el momento adecuado?

«El debate es si la mujer está demasiado influenciada por la Iglesia y tiene una visión más conservadora que impediría a la República desarrollar los avances civiles en caso de votar», desgrana Martínez, quien insiste: «La duda no es si debe ser un derecho, sino si es el momento adecuado». En palabras de Kent: «Entiendo que son necesarios algunos años de convivencia con la República ; que vean las mujeres que la República ha traído a España lo que no trajo la monarquía». En su caso, la mayoría de sus compañeros valencianos votan como ella... o repiten ausencia.

«¿Cómo puede decirse que cuando las mujeres den señales de vida por la República se les concederá como premio el derecho a votar?», respondió Campoamor. Las mujeres votaron por primera vez en 1933 en unas elecciones que ganó la derecha que pactó con el Partido Radical. «Hay voces que dicen que ya lo habían avisado, pero es injusta esa afirmación, no se puede achacar la derrota de la izquierda al voto femenino porque tres años después, también votando ellas, gana el Frente Popular», sentencia Martínez.

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