La Fundación Amancio Ortega ha donado 280 millones de euros al Ministerio de Sanidad para la compra de diez equipos de protonterapia, los tratamientos más avanzados contra el cáncer, que irán distribuidos a País Vasco (uno en Vizcaya), Cataluña (dos en Barcelona), Galicia (uno en A Coruña), Andalucía (uno en Sevilla y otro en Málaga), Comunitat Valenciana (uno en Valencia), Comunidad de Madrid (dos en la capital) y Canarias (uno en Gran Canaria).

Así, se convertirán en los primeros equipos de protonterapia que pertenecerán al Sistema Nacional de Salud (SNS), ya que hasta el momento los dos únicos en territorio español están en Madrid y son propiedad de Quirónsalud y de la Clínica Universidad de Navarra. La compra la anticipará Sanidad con cargo a cuatro años en los Presupuestos Generales del Estado (PGE), aunque el coste total para las arcas públicas será de «cero euros» gracias a la donación.

Según el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, los criterios que se han seguido para asignar estos equipos a las comunidades autónomas son «la existencia de profesionales que puedan aplicar estos tratamientos, el tamaño de la población, la accesibilidad geográfica de la ciudad y su ubicación».