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Los presupuestos enfadan a À Punt por congelar su subvención

La radiotelevisión lamenta que la devolución del IVA les supone un recorte de 10 millones

Imagen de archivo de la sede de À Punt en Burjassot. | F.BUSTAMANTE

Dicen que hay veces que menos es más, aunque para À Punt, los Presupuestos de la Generalitat de 2022, igual es menos. Las cuentas presentadas por el Consell el pasado miércoles han generado un enorme malestar dentro de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació que rige el servicio de radiotelevisión público.

La entidad recibirá para el próximo año la misma subvención que la que dipuso por parte de la Administración autonómica en 2021: 58,6 millones de euros. Sin embargo, la congelación de la partida le supone un descenso en la posibilidad de gasto como lamentaron fuentes de la corporación. En primer lugar porque el presupuesto global de la CVMC baja un 1,6 % respecto al de 2022 y se queda en 66,9 millones. Pero sobre todo, el problema está en el litigio con la Agencia Tributaria.

La normativa que señala que el IVA no será devuelto a las televisiones autonómicas descuadraba las cuentas de la tele y las sigue descuadrando. Y más cuando, protestan, no se corrige por parte de la Generalitat. Así, las quejas están en que antes se les devolvían alrededor de 10 millones de euros del IVA soportado y ahora no por lo que manteniendo las subvenciones desde el Consell la entidad sufre un serio recorte.

«Habrá que ajustarse y supone destinar 10 millones menos al sector audiovisual», indican fuentes del ente quienes expresan, no obstante, que de momento los presupuestos no están del todo aprobados y que «todavía queda camino». En este sentido, el año pasado ya se les asignó dos millones de euros más durante las enmiendas.

El malestar dentro del ente es compartido tanto por representantes del Consejo Rector como por parte de las fuerzas sindicales. Desde estas calificaban la congelación de la partida del ejecutivo como un «jarro de agua fría». «Rompe la dinámica de crecimiento» y sigue lejos del 0,3 % que pone la ley, se quejan.

Además, muestran preocupación porque se sigue sobrepasando la norma de que el coste de la plantilla no supere el tercio del total (el gasto es del 21,3 millones, un 38 %) y de que esta situación «bloquea la posibilidad de redimensionar la plantilla».

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